Pese a las críticas, Cruz Azul responde a la exigencia, tanto de su afición, como del grupo tres, en el que están metidos junto con Chivas, puntero general con 29 unidades y San Luis, segundo con 26.
A pesar de ello, La Máquina no afloja, su triunfo ante Pumas del sábado anterior así lo señala. Gracias a él, los cementeros tienen 25 puntos y la posibilidad viva de meterse directos a la Liguilla.
Sergio Markarián, su técnico lo sabe, “ganamos un partido muy importante, porque la lucha en el grupo es muy cerrada”, y como no, los tres mejores equipos de la competencia marchan apretados en el carro número tres y palmo a palmo luchan por alcanzar los dos boletos directos que en el sector hay para la fiesta grande, porque el tercero tendrá que hacer una doble escala en el repechaje, algo que sin duda no quiere La Máquina, de ahí que el cierre deban apretar aún más.
Para ello, como Markarián lo ha dicho, necesitarán “de todo el esfuerzo y sacrificio de los muchachos y por supuesto mucha aplicación. Debemos seguir creando situaciones de gol y ser efectivos en los tres partidos que nos quedan”.
El primero de esa tercia será el próximo viernes cuando se metan al estadio 3 de marzo ante los Tecos, ante un equipo que no conoce la derrota en casa desde que José Luis Trejo tomó el timón en la fecha 15, una prueba nada fácil para el azul.
