En algunas ocasiones nos comentan los padres la preocupación que tienen al observar en las boquitas de sus niños que tienen dientes amontonados, que los dientes nuevos no le caben y ¿qué pueden hacer al respecto?
La falta de espacio para el acomodo de piezas permanentes en la población infantil, puede ser provocado por muchos factores, como herencia, caries, extracción o pérdida prematura de piezas temporales, entre otros.
Cuando el niño presenta caries extensas que lesionan la pared proximal en molares temporales, provocará un acortamiento de arco y por consecuencia una falta de espacio también, así mismo, la pérdida prematura de una pieza temporal, ya sea por extracción o por traumatismo, puede ocasionar que los dientes localizados en la parte posterior al lugar vacío, se muevan, cerrando este espacio, provocando que el diente permanente que debe ocupar este lugar, quede atrapado por falta de espacio para su erupción y consecuentemente salga fuera de lugar.
La prevención temprana de la pérdida de espacio se lleva a cabo desde el momento en que se obturan las muelitas, devolviéndoles su anatomía inicial, evitando que se pierdan los puntos de contacto, favoreciendo así que los dientes permanentes puedan erupcionar en su lugar correctamente.
Así también, cuando lamentablemente alguna pieza temporal se encuentra muy destruida y no es posible rehabilitarla, siendo necesaria su extracción, el uso de aparatología para guardar el espacio, es una excelente alternativa.
Recuerde, si usted observa que su niño presenta lesiones cariosas, algún apiñamiento de sus dientes, o perdió alguna pieza dental temporal y usted presume que se está cerrando el espacio, no lo dude, y acuda a realizarle una valoración con el odontopediatra, así, esta problemática bucodental podrá ser atendida y manejada de una manera oportuna.
“Es la prevención, nuestra mayor preocupación”.
¡Hasta la próxima!
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