Con un gran dispositivo de seguridad, París se prepara para recibir el recorrido de la antorcha olímpica. (AP)
Las autoridades francesas han previsto medidas extremas de seguridad para el paso de la antorcha olímpica por París mañana, con unos 3,000 agentes movilizados, para evitar eventuales incidentes con grupos que quieren denunciar las violaciones de los derechos humanos en China y en el Tíbet.
“Estamos asombrados. Es increíble”, denunció ayer el secretario general de la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF), Robert Ménard, para quien China habrá conseguido que “durante unas horas” París se parezca a “la plaza de Tiananmen”.
En rueda de prensa, Ménard señaló que el dispositivo programado por la Prefectura de Policía de París para el paso este lunes de la antorcha de los Juegos Olímpicos de Beijing del próximo agosto supera el reservado a las visitas de jefes de Estado, incluido el de Israel, Simón Peres, en su reciente estancia en la capital gala.
“400 policías para proteger la Llama en un espacio de 200 metros” en torno a los portadores, “32 furgones de agentes antidisturbios, 65 motos, un helicóptero y barcos en el Sena”, dijo Ménard.
La “burbuja” en torno a los 80 portadores de la antorcha que se irán relevando entre la Torre Eiffel y el estadio Charlety, un recorrido de unos 27 kilómetros, incluirá también a policías sobre patines y corredores del cuerpo de bomberos.
La Prefectura de Policía “ha perdido la cabeza” y está dispuesta a “todo” para “complacer” a las autoridades chinas, y “sólo falta pedir a los parisinos” que no salgan a la calle, dijo el responsable de RSF, una de las organizaciones de derechos humanos que están en el punto de mira de las autoridades para el lunes.
“No somos agitadores, ni kamikazes (...) no queremos un solo gesto violento”, nada que pueda ser “malinterpretado”, dijo Ménard, al argumentar que “la violencia está del lado del poder chino”.
Ante la actitud de las autoridades francesas, a la que acusó de “complicidad” con China, RSF ha revisado sus planes y se limitará a “una o dos acciones simbólicas”, “espectaculares pero respetuosas” de los Juegos y de los portadores de la antorcha, explicó.
RSF también llama a los parisinos a acudir masivamente al trayecto que seguirá la antorcha vistiendo camisetas o esgrimiendo banderines que muestran los cinco anillos olímpicos como esposas sobre un fondo negro, y debajo la inscripción “Beijing 2008”.
Se prevé que mañana en el maratón de París se vean ya algunos de los 10.000 banderines producidos o las camisetas.
Para Ménard, la actitud de las autoridades francesas es “una vergüenza” que hace presagiar “capitulaciones” ante las de China, que sigue siendo “la dictadura más grande del mundo”.
Diversas asociaciones de derechos humanos así como la comunidad tibetana en París han programado manifestaciones para el lunes.