El presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Guillermo Ortiz Mayagoitia, deslindó responsabilidades ante la crisis de inseguridad que se vive en el país, y ubicó algunas de las fallas en los poderes Legislativo y Ejecutivo, por la falta de leyes claras y por los escasos resultados en la detención de los delincuentes y la mala integración de los expedientes por parte de los ministerios públicos.
Al tomar protesta a 38 nuevos jueces y magistrados, ante la cúpula del Poder Judicial de la Federación, Ortiz Mayagoitia reconoció que "es claramente justificada la indignación de la sociedad al sentir amenazada tranquilidad y su seguridad personal y familiar".
Pero recordó y aclaró que para construir y consolidar nuestro sistema de justicia y de seguridad pública corresponden al Estado tres tareas fundamentales.
La primera, dijo, tiene que ver con la creación de leyes adecuadas, responsables y útiles que permitan sancionar los delitos, a fin de que el derecho resuelva a sus necesidades del momento.
Las leyes, reiteró, deben ser claras, contundentes y precisas.
"La ley -destacó- también debe determinar procedimientos ineludibles, para que los jueces puedan determinar legítimamente castigos y sanciones".
La segunda tarea, recordó, consiste en procurar la prevención de los ilícitos y perseguir a quienes los cometen.
Por eso, dijo, ante los serios problemas de delincuencia, la educación es la principal herramienta preventiva.
Pero -agregó- la prevención no basta, es necesario adoptar acciones inmediatas para detener y castigar a quienes delinquen.
Y una vez que son detenidos, precisó, se requiere de investigaciones eficientes, averiguaciones previas mejor integradas, con un mejor respaldo jurídico, técnico y pericial.
Y la tercera tarea, dijo, es la que le corresponde a los jueces al dictar sentencias imparciales, objetivas e independientes. Y esa, les dijo a los recién nombrados jueces y magistrados, esa será su tarea, sujetando su actuación a lo que dicen las leyes y la Constitución.
Los nuevos juzgadores, aseguró el presidente de la Corte, cuentan con una amplia trayectoria judicial y son expertos en derecho que fueron seleccionados cuidadosamente por el Consejo de la Judicatura Federal y que serán sujetos, como todos, a medidas de vigilancia y disciplina para garantizar su actuación.