Los propietarios de los bares y cantinas de La Garcita, ayer se inconformaron y levantaron una protesta porque las mujeres que se dedican a la prostitución, ya no van al sector rojo sino a los negocios establecidos en la ciudad.
Miembros de la Unión de Vendedores de Vinos, aseguran que las mujeres ya laboran en el Centro de la ciudad
Los miembros de la Unión de Vendedores de Vinos, Licores, Cervezas y Similares Confederada, cerraron los negocios de La Garcita por falta de mujeres, mismas que ejercen la prostitución en los antros ubicados en la ciudad, que según ellos son propiedad de algunos regidores.
Gregorio Rodríguez, Francisco Herrera, Alfonso Aguilar, Carlos González, Raúl Sifuentes, Juan Mauricio Mata, Gerardo Contreras y Camilo Puentes, se inconformaron por la “ingobernabilidad” existente en Matamoros porque la primera autoridad, asegura, “se deja llevar por los regidores, culpables de que la prostitución ahora esté en la zona urbana”.
Externaron que la prostitución ya no está en La Garcita, pues de las más de 120 mujeres registradas en el padrón que maneja Regulación Sanitaria a cargo de Horacio Padilla Valles, están centradas en los antros ubicados en la ciudad denominados La Canasta -que aseguran, maneja un hermano o sobrino de la primera regidora María del Refugio Piña García-, Los Compadres, La Rueda, El Forastero, El Rojo, El 12 y El 13, por nombrar algunos.
Los propietarios de los bares y cantinas del sector rojo, mostraron la copia de un documento enviado al gobernador Humberto Moreira Valdés donde exponen la problemática.
Ahí explican que en el trienio 1982-1984 del ex presidente municipal Héctor Mireles Castañeda, fue la reubicación de La Garcita al oriente de la ciudad, en la colonia Mariscal, por existir más de 50 cantinas y porque la situación ya estaba dando mala fama y pésimo aspecto al Centro, “lo que reconocimos y aceptamos en aquel momento”.
En la misiva, ellos evidencian a la autoridad estatal que Matamoros se encuentra invadida por expendios, bares, antros, tugurios con “descarado” ejercicio de la prostitución y respecto a la ciudadanía, “algunos de ellos, propiedad de ediles municipales, disfrazados con prestanombres”.
En entrevista en el área de La Garcita -a la entrada colocaron una pancarta donde afirman el cierre de La Garcita-, los propietarios y dueños de los bares y cantinas que ahí se ubican, aseguraron que los regidores “siempre han regenteado a las mujeres, un caso concreto es la negociación que hizo el regidor panista comisionado en Salud, Ezequiel Soto García quien promovió con el dueño de La Canasta, la presencia de 10 a 15 mujeres “dizque para funcionar como “meseras”, cuando son las mismas que están dentro del padrón que maneja los de Regulación Sanitaria”.
Censuraron que Horacio Padilla Valles en lugar de trabajar y aplicar el reglamento para acabar con la problemática, “nos haya dejado plantados y abiertamente ante nosotros, se haya declarado incompetente para resolver esta problemática”.
Aunque se trató localizar a las autoridades municipales para conocer su versión, fue imposible localizarlos.
Ya se cansaron
Por no encontrar respuesta ante el Municipio, los dueños de las cantinas y bares de La Garcita, mejor decidieron hacer pública su problemática:
* Se cansaron y mejor decidieron cerrar los negocios ya en quiebra por la falta de mujeres.
* La prostitución ya está dentro de la ciudad, cuando el alcalde Raúl Onofre Contreras en campaña y al inicio de su gestión, aseguró que la prostitución sería reubicada y centralizada.
* “El problema lo hacen los regidores, quienes no van y las únicas que están son sus secretarias que se las pasan jugando al
“Solitario” en sus computadoras”.
FUENTE: Unión de Vendedores de Vinos, Licores, Cervezas y Similares
