EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Una muestra del “tortuguismo” que hay en la Procuraduría General de Justicia del Estado de Coahuila (PGJEC) se detectó con el cumplimiento de una orden de aprehensión por homicidio, contra un sujeto que ya tenía más de un año en prisión acusado de un delito similar.
Mario Pineda Rangel alias “El Huevo”, mató a dos personas en un mes y medio. El crimen que lo metió a prisión ocurrió el 30 de junio de 2007 cuando disparó un arma contra Antonio Macías Mijares en la colonia Nueva Rosita.
Sin embargo, a los pocos días de su detención fortuita por policías preventivos de Gómez Palacio en los primeros días de julio de 2007, “El Huevo” confesó que también había quitado la vida a balazos a Marcial Fernández Sarabia de 69 años de edad, en el panteón municipal, el pasado 15 de mayo de 2007.
Por el asesinato contra Antonio le decretaron auto de formal prisión a Mario en el Juzgado Tercero del ramo penal, motivo por el cual sigue internado en el Centro de Readaptación Social (Cereso).
A pesar de que tenía más de un año en el Cereso por su probable responsabilidad en el delito de homicidio simple doloso, la Policía Ministerial acaba de cumplir una orden de aprehensión por homicidio contra el mismo sujeto por un crimen que cometió en mayo de 2007.
Desde julio del año pasado, en la agencia del Ministerio Público de Delitos contra la Vida y la Salud de las Personas, anunciaron la consignación al Juzgado Cuarto del ramo penal del proceso contra Rangel Pineda por la muerte del anciano que no fue identificado hasta dos días después del crimen por su hija y sólo se contaba con la escueta versión de algunos testigos que no ampliaban más sus declaraciones por temor de ser atacados por el inculpado.