El mexicano Anda Pineda Doval, fue sentenciado a cadena perpetua por la muerte de diez indocumentados, entre ellos una embarazada, que fallecieron cuando el vehículo en el que eran transportados se volcó en la frontera de Arizona.
Pineda, de 22 años y originario de Michoacán, recibió la sentencia el jueves, informó ayer la fiscalía federal en Arizona en un comunicado.
El mexicano fue identificado como “El Coyote” y el conductor de la camioneta que perdió el control del vehículo cuando trataba de escapar de agentes de la Patrulla Fronteriza en agosto de 2006, cerca de la población fronteriza de Yuma, en Arizona.
Después de haber sido confrontado por un agente fronterizo que patrullaba el camino, utilizado por la agencia federal para establecer retenes de vigilancia, Pineda Doval se rehusó a detener la camioneta que transportaba a 20 inmigrantes indocumentados, entre ellos dos mujeres embarazadas, que se dirigían a Los Ángeles, California.
El contrabandista perdió el control del vehículo cuando trató de esquivar un cinturón de clavos colocado por un agente fronterizo con el propósito de detener el vehículo.
Los asientos de la camioneta habían sido retirados y ninguno de los pasajeros llevaba puesto el cinturón de seguridad, lo que provocó que varios de ellos salieran expulsados durante el accidente.
“Esta sentencia manda un mensaje a todos los contrabandistas que ponen en peligro las vidas de personas por beneficio propio”, dijo Troy Henley, agente especial a cargo del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) en Phoenix, Arizona.
“ICE seguirá trabajando muy de cerca con otras agencias del orden para que estos individuos y organizaciones envueltos en esta empresa despiadada paguen por el sufrimiento y las pérdidas humanas que causan”, finalizó.
Por otro lado, un inmigrante indocumentado mexicano fue declarado culpable del asesinato de un agente policial. El jurado debe decidir si Juan Leonardo Quintero Pérez, de 34 años, merece la pena de muerte.
El agente Rodney Johnson, de 40 años, recibió cuatro disparos en la cabeza tras detener a Quintero Pérez por conducir sin licencia.
Según actas del tribunal, Quintero Pérez fue deportado en 1999 después de una condena por abuso de menor, pero logró regresar a Texas.