La Policía ha aprehendido a ex agentes que participan en Secuestros, asaltos y ejecuciones.
Desatención
No existe un programa de seguimiento a los policías que abandonan la corporación, ya sea por renuncia voluntaria o por despido.
Durango. Los pocos resultados que se obtienen en las investigaciones de los delitos se debe en muchas de las veces a que los criminales conocen las técnicas de las corporaciones policiacas y las evaden para no ser detenidos, de ahí que se deduce la coalición de agentes o ex agentes con los malhechores; ayer El Siglo de Durango publicó la declaración del doctor Manuel Salazar Enríquez, en la que señala que el 75 por ciento de los jefes de grupos delictivos perteneció o se relacionó con alguna dependencia de seguridad.
Basta un botón. De acuerdo a la información dada a conocer por el Ejército Mexicano, a principios de semana los soldados salieron rumbo a Canatlán para detener al director de Seguridad Pública Municipal de esa localidad, Jorge Gutiérrez Corral, por su probable participación o coalición con hechos delictivos y aunque éste logró escapar se le aseguraron evidencias importantes que hacen presumir que tenía el control de un grupo de extorsionadores y secuestradores.
Larga lista. Por otra parte, en la Dirección Estatal de Investigación (DEI) se han dado varios casos de personas que después de haber estado enrolados en la corporación fueron sorprendidos en la comisión de delitos graves como secuestros, asaltos e inclusive algunos que han sido ejecutados por estar relacionados con el narcotráfico.
Por mencionar algunos de los casos en que los agentes han dejado la corporación para unirse a la delincuencia está el de Jhovanny Corona Palomino, de 32 años, ex agente de la extinta Policía Ministerial del Estado, quien fue detenido junto con otras tres personas por los delitos de secuestro y robos bancarios, según las denuncias presentadas por Banco Azteca y HSBC, con pérdidas de más de 800 mil pesos.
Decapitados. Además hay otros ex agentes que fueron ejecutados por su presunta participación en el crimen organizado como es el caso de Pedro Bocanegra Torres, cuyo cuerpo apareció decapitado y sin sus extremidades en Gómez Palacio el año pasado; había pertenecido a la Judicial y a la Policía del citado municipio.
También fue encontrado sin vida Juan Ferman Ibarra; su cuerpo “encostalado” y su cabeza y extremidades aparte en una bolsa, ambos estaban inmiscuidos en el ámbito de las drogas, según lo informó la misma corporación.
Otros ex policías. El ex judicial Jaime Rocha Ramírez, en las inmediaciones del poblado Gabino Santillán, fue estrangulado y como dato curioso le cercenaron el dedo índice y se lo metieron a la boca.
De varios balazos con “cuernos de chivo” el ex comandante de la DEI, Cuitláhuac Esaú Mena Moreno, fue acribillado en el exterior de su domicilio, asimismo, con huellas de tortura y estrangulado el ex judicial René Hernández Villa fue localizado en el camino que conduce al poblado Garabitos.
