El militar Carlos Alberto Navarrete Marino, de 29 años de edad, fue decapitado por presuntos sicarios del crimen organizado y su cabeza fue abandonada en el interior de una cubeta de aluminio a la altura del monumento a Las Banderas, de la avenida “Lázaro Cárdenas”, en esta capital.
De acuerdo a la información de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana (SSPPC), el cuerpo cercenado del militar fue localizado como a las 22:30 horas del lunes bajo un puente a la entrada del poblado de Tepechicotlán, a 10 kilómetros aproximadamente al sur de esta ciudad, y su cabeza fue encontrada posteriormente cerca de la 01:00 de la madrugada del martes.
A un lado de la cubeta de aluminio que contenía la testa del militar se encontró un narcomensaje que decía: “Según militares andan combatiendo a la delincuencia y resultan ser secuestradores, esto les va a pasar putos”.
Con la decapitación del militar que según la SSPPC, pertenecía al 50 batallón de infantería con sede en esta capital, son tres las personas que han aparecido en esta capital, ejecutadas mediante el cercenamiento de sus cabezas, dos de ellas el domingo pasado.