A pesar de tener un año inaugurada, la planta no trata bien agua residual.
Además de padecer problemas en su operación, que han retrasado su entrega al Municipio, la planta tratadora de aguas del Parque Industrial de Gómez Palacio no aguantó dos horas de lluvia, que la dejaron funcionando a la mitad de su capacidad.
La planta, que costó 110 millones de pesos, presentó reblandecimiento del terreno y hundimientos en un estanque y la caseta que alberga el equipo mecánico, tras el aguacero del domingo pasado.
La Planta Tratadora de Aguas Residuales Oriente fue construida para evitar que las empresas del parque industrial descargaran sus aguas negras al lecho seco del Río Nazas, práctica que persiste aún.
La planta fue inaugurada en mayo de 2007 por el Presidente Felipe Calderón, pero más de un año después apenas puede remover el 85 por ciento de los contaminantes, produciendo una calidad no apta para venderla a los sectores agrícola o industrial.
El Ayuntamiento advirtió a las empresas operadoras que enfrentan una multa y la rescisión del contrato si persisten las deficiencias.
“Con las lluvias hubo asentamientos que se hundieron por falta de compactación, falta de calidad de la obra, tenemos la facultad de no recibir esta planta si no está en la calidad que requerimos”, dijo el alcalde Ricardo Rebollo Mendoza.
Los desperfectos ocurrieron cuando las empresas operadoras debieron haber concluido las pruebas para determinar la calidad del agua tratada, proceso que no ha sido terminado.
Personal del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado (Sideapa) recibió ayer en la planta a técnicos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) que llegaron de la Ciudad de México para analizar la calidad de la obra y los procesos.
El director del Sideapa, José Miguel Campillo, dijo que lo ocurrido representa un retroceso y que la planta no será recibida por el Sideapa hasta que cumpla con las condiciones del contrato.
La empresa DURSA, una de las operadoras de la planta, se comprometió a hacer las reparaciones necesarias en 15 días, mientras que el Sideapa dio un plazo de 60 días más para concluir la fase de pruebas, que venció el pasado 28 de agosto.
Aunque a planta tiene capacidad para tratar 120 litros de agua por segundo, nunca ha llegado a esa capacidad y a últimas fechas trataba poco más de 70 litros por segundo.
Los daños
Hundimiento en la estructura de pre-tratamiento.
Cuarteaduras en las casetas que albergan los motores que inyectan aire a estanques. Tendrán
que ser destruidas y levantadas de nuevo.
Daños al cableado eléctrico subterráneo, que se vio afectado por los hundimientos. Esto provocó la desconexión de bombas.
