Guadalupe Acosta Naranjo, designado ayer presidente interino del Partido de la Revolución Democrática (PRD), negó que su nombramiento carezca de fundamentos por falta de quórum en el 11 Pleno Extraordinario del Consejo Nacional del partido.
En la jornada de este domingo, Acosta Naranjo, miembro de la corriente Nueva Izquierda (NI) que encabeza Jesús Ortega, fue electo presidente sustituto del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRD.
Sin embargo, Alejandro Encinas, candidato de Izquierda Unida (IU), desconoció a Acosta Naranjo y a Martha Dalia Gastelúm, electa secretaria general sustituta del PRD, porque, dijo, es una decisión tomada en un Consejo Nacional que no se apegó a la normatividad interna.
En entrevista, el nuevo interino del PRD afirmó que estas decisiones “son necesarias para resguardar la legalidad” del partido, pues “Acción Nacional ya presentó una queja ante el IFE (Instituto Federal Electoral) para que se nos investigue y sancione al PRD por no haber renovado a tiempo los órganos de dirección y si no hubiéramos tomado esta medida ayer correríamos el riesgo de ser sancionados”.
En torno a la figura de Andrés Manuel López Obrador, el también ex secretario general del partido reprochó que “quienes queremos (la) salida para el país nos convertimos en traidores por no seguir la línea de un dirigente, por muy importante que éste sea”.
Acosta Naranjo dijo que apoyará a cualquiera de los candidatos que resulte ganador para dirigir al partido: “si gana Encinas cerraremos filas con él; si es Ortega, lo mismo”.
Reconoció la crisis en la que se encuentra sumido el partido tras las elecciones para renovar su dirigencia realizadas en marzo pasado, pero afirmó que “siempre es un honor dirigir al PRD, aún en esta situación tan crítica”.