Expertos anti-explosivos inspeccionan el lugar de una de las explosiones que se produjeron ayer en diferentes puntos de Bogotá, Colombia. (EFE)
Al menos 10 heridos dejó ayer la explosión simultánea de cinco bombas de magnitud menor en Bogotá mientras avanzaba una marcha de trabajadores en apoyo a miles de indígenas colombianos que reclaman tierras, informó la Policía.
El comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, general Rodolfo Palomino, dijo ayer a periodistas que los artefactos fueron activados por desconocidos en recipientes de basura ubicados en puntos estratégicos de la ciudad.
“Son bombas de bajo poder, que no han producido daños mayores, pero sí algunos lesionados de menor gravedad”, señaló el oficial, tras indicar que se investiga quiénes pudieron ser los responsables de los ataques.
Las explosiones ocurrieron en momentos en que miles de trabajadores marchaban hacia la Plaza de Bolívar de Bogotá, en el marco del paro estatal convocado en apoyo a las protestas indígenas que se realizan en el Sur del país.
Uno de los artefactos estalló cerca del Centro comercial Salitre Plaza, lo que produjo pánico entre decenas de transeúntes y compradores que recorrían en ese momento el lugar, reportó la Policía.
El resto de explosivos fue activado en el Norte y Occidente de la ciudad, con un balance de 10 heridos, lo que obligó a una reunión de emergencia por parte de las autoridades de la capital.
Palomino aseveró que un autobús de pasajeros fue quemado también en el Puente Aéreo local, sin que se produjeran víctimas, pero sí daños materiales.
Agregó que, de acuerdo con las investigaciones, los explosivos tenían una carga de entre 450 y 500 gramos de pólvora y metralla, lo que evitó que los destrozos fueran mayores.
DESACTIVAN EXPLOSIVOS
Por otro lado, la Policía desactivó ayer seis cargas explosivas en la carretera Panamericana, en el tramo por donde discurre la gran marcha indígena de protesta al Suroeste de Colombia.
El comandante de la Policía en esa zona del país, general Gustavo Adolfo Ricaurte, confirmó que en un paraje de la Panamericana que une los poblados de Santander de Quilichao y Caloto, por donde ya pasó la movilización de nativos, encontró algunas bombonas de gas con explosivos que habían sido robadas días antes.
Unos 20 mil indígenas colombianos retomaron su marcha de protesta hacia la ciudad de Cali, capital del departamento del Valle del Cauca, después de que rechazaran la propuesta del presidente colombiano, Álvaro Uribe, de reunirse con ellos el domingo en Popayán, capital del vecino departamento del Cauca.
‘Máximo jefe de las FARC está herido’
El ministro colombiano de Defensa, Juan Manuel Santos, aseguró ayer que el máximo líder de las FARC, Guillermo León Sáenz, alias “Alfonso Cano”, resultó herido en una mano durante un combate con el Ejército hace dos meses.
El funcionario indicó que los enfrentamientos con la guardia de “Alfonso Cano” tuvieron lugar en el Cañón de las Hermosas, uno de los bastiones de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), en el Centro-Sur del país.
“Nos han confirmado que está herido en una mano, aparentemente en un combate hace dos meses. Tiene una dificultad en una mano y lo estamos correteando (persiguiendo), pero todavía estamos lejos, no muy cerca”, dijo Santos.
El ministro añadió que el máximo jefe rebelde “está pasando un tiempo difícil” por la herida que le hicieron las tropas e indicó que aún falta tiempo para “cerrar el círculo” contra “Cano”.
“Alfonso Cano” asumió la jefatura de las FARC en abril pasado tras la muerte del líder histórico de esa guerrilla, Pedro Antonio Marín, alias “Manuel Marulanda” o “Tirofijo”, el pasado 26 de marzo a causa de una insuficiencia cardíaca.
