Miles de personas participaron en las peregrinaciones y visitas a la Iglesia del Cerrito en Lerdo, con motivo de la celebración del 12 de diciembre.
El fervor religioso hacia la Virgen de Guadalupe se hizo patente en las calles e iglesias de la ciudad, donde hubo danzas, altares en varios cruceros, ofrendas florales y la tradicional Misa de Gallo.
El crucero de calle Cuauhtémoc y avenida Aquiles Serdán fue cerrado al tráfico en virtud de que se colocó un altar de cinco metros de ancho por tres de altura, donde había decenas de imágenes de la Virgen del Tepeyac.
En distintos calles también el paso al tráfico se cerró por las danzas que no cesaban desde la mañana y hasta la tarde.
Desde la noche del jueves 11 que terminaron las peregrinaciones hacia la Iglesia de Guadalupe, conocida también como la Iglesia del Cerrito, ubicada en la parte alta de la colonia San Isidro, se realizó también la carrera de antorchas, que terminó a las 23:00 horas para luego dar paso a la Misa de Gallo y ya en la madrugada las tradicionales Mañanitas con mariachi, no obstante las bajas temperaturas que se dejaron sentir.
Por la mañana comenzaron a llegar las familias, algunas de las cuales llevaban a sus pequeños hijos vestidos de Juan Diego para adorar la imagen de la Virgen.
“Gracias a Dios, sigue existiendo mucha fe entre los fieles y vienen muchos peregrinos a darle gracias a la Virgen por los favores recibidos”, dice el sacerdote de la Iglesia del Cerrito, Fernando Contreras Berumen.
Vestido con pantalón de mezclilla, botas vaqueras y cinto pitiado, recuerda el sacerdote: “el primer milagro de la Virgen, fue el 12 de diciembre de 1531, cuando el indio Juan Diego llegó junto a fray Juan de Zumárraga y le presentó la imagen de la Santísima Virgen plasmada en su tilma, que ha sido analizada por científicos, pues pese a los años transcurridos, no se ha deteriorado”.
Ayer continuaron las celebraciones que incluyeron una peregrinación con música de banda por las calles de la colonia San Isidro, misa a las seis de la tarde, “para pedir por todos los habitantes de la parroquia” y quema de pólvora a las ocho de la noche.
Día de asueto
Funcionarios, empleados administrativos y sindicalizados de la Presidencia Municipal, se tomaron el día 12 por autorización del alcalde, Carlos Aguilera Andrade.
“El día lo cambiamos, ya que el día feriado de noviembre se trabajó y les dimos oportunidad a los trabajadores para que tuvieran oportunidad de participar en las festividades religiosas”, explica el edil.
Departamentos como Seguridad Pública, Tránsito y Vialidad, Limpieza y en Tesorería, laboraron debido a la naturaleza de sus funciones.
