El sueño americano se convirtió en pesadilla. Alejandra Velázquez Loera, de 22 años, se dirigía a su trabajo en motocicleta en Phoenix, Arizona, cuando sufrió un accidente.
Traumatismo craneoencefálico y fracturas en el tórax, el húmero y el fémur izquierdo fue el diagnóstico.
Su mala fortuna no paró ahí. El percance fue reportado por las autoridades de Arizona al Servicio de Inmigración de Estados Unidos y como Alejandra estaba de manera ilegal en el país fue deportada a Hermosillo, Sonora, a pesar de su delicado estado de salud.
“El Gobierno Federal y el Consulado mexicano no dieron el apoyo que se necesitaba en este caso, ya que la mujer fue reportada en estado vegetativo y aún así la sacaron en helicóptero para trasladarla a Sonora”, explicó el regidor de Ecatepec, Osmar León Aquino.
Su familia, dijo el edil, pagó un millón de pesos para cubrir los gastos de las tres operaciones a las que fue sometida la joven y los 18 días que estuvo internada en el hospital de Phoenix, Arizona.
Esas erogaciones dejaron prácticamente en la ruina a la familia de Alejandra que tuvo que desembolsar esa cantidad de dinero, contó José Luis Loera, tío de la joven mujer quien dejó a sus dos hijos de dos años y siete meses de edad en Arizona.
Entonces, solicitaron ayuda a las autoridades de Ecatepec para que fuera trasladada al municipio mexiquense donde viven sus parientes.
Tras seis días de gestiones y la contratación de una ambulancia privada se logró traer a Alejandra para que sea atendida en el Hospital General Ecatepec “Las Américas”.
En Ecatepec, funciona desde el año pasado la única casa de ayuda a migrantes donde reciben cobijo y alimentación quienes procedentes principalmente de Centroamérica intentan cruzar a Estados Unidos.