Ayer 7 empresarios de la industria de la masa y la tortilla de La Laguna de Durango recibieron apoyos económicos dentro del Programa Mi Tortilla.
De 500 tortillerías registradas en Durango, ni el 10 por ciento de ellas fue beneficiada con el Programa Mi Tortilla. La razón de que pocos hayan obtenido un beneficio económico para mejorar las instalaciones y el servicio al cliente es simple: los empresarios del ramo desairaron la invitación hecha por el Gobierno, ya que sólo 42 de ellos participa en los talleres de capacitación para modernizar sus negocios.
En rueda de prensa, el delegado estatal de la Secretaría de Economía, Jesús Martínez Martínez, dio a conocer que fueron pocos los que respondieron al llamado, y no creyeron que el Gobierno Federal junto con el Estado iban a dar apoyos económicos a esta rama productiva, por lo que simplemente decidieron no participar.
Durango fue una de las pocas entidades del país en poner en marcha este programa piloto, por lo que ayer concluyó esta primera etapa con la entrega de cheques por 150 mil pesos a dueños de tortillerías de La Laguna de Durango. De los 42 participantes a nivel estatal, 7 de ellos operan en la Comarca Lagunera. En La Laguna Coahuila se desconoce si aplicaron dicho esquema, dada la ausencia del subdelegado de Torreón.
Martínez declaró que “no hubo la confianza en el programa”. En entrevista, manifestó que gracias a la participación de una entidad de fomento de la ciudad de Durango, la cual se encargará de administrar los recursos del esquema, fue posible bajar los recursos federales y combinarlos con la aportación estatal.
Afortunadamente, dijo que el pasado jueves fue signado un convenio con el Fondo Durango para que sea el encargado de administrar dichos recursos para el ejercicio 2008. Haciendo mención que en Zacatecas, Colima, Nayarit, Tabasco y el DF, el esquema ha sido aplicado, reconoció que la poca respuesta de los industriales de la masa y la tortilla tuvieron interés en participar, “no quieren el recurso”, y en su lugar solicitaron a las autoridades de la Secretaría de Economía intervenir para regular la actividad, aunque no les dieran dinero, tarea que reconoció que no le compete a esta dependencia, sino al propio Municipio.
Después de entregar 7 cheques a empresarios del ramo con un promedio de 150 mil pesos, cada uno, con una tasa de interés del 6 por ciento anual, con un periodo de gracia de 5 meses. El presupuesto asignado es de 7.5 millones de pesos, por lo que se han colocado 6.136 millones de pesos a la fecha, quedando un remanente de 630 mil pesos, aseguró el delegado estatal.
Dichos recursos serán aplicados como reservas para entregar bonos de chatarrización por 30 mil pesos a industriales que deseen sustituir sus equipos.
Los recursos no podrán ser utilizados para la compra de equipo de transporte y compra de nueva maquinaria, sino a mejorar instalaciones, mejor administración de los recursos y a eficientar la actividad.
Segunda etapa
Luego de concluir esta primera etapa del plan piloto del programa, Martínez anunció que una vez que entregaron los recursos a los participantes iniciarán una segunda etapa para dar apoyos económicos a esta rama productiva, por lo que están en las negociaciones para hacer una nueva mezcla de recursos para 2008. Sin definir fecha, estimó que esto será en breve.
En la entidad se promedia un kilo de tortilla en 8.50 pesos, aunque existen casos como en Lerdo que el precio en algunos negocios es de 9.50 pesos. Por ello hizo un llamado a los empresarios a que “confíen, se acerquen con nosotros para recibir capacitación, consultoría y extensionismo, aún cuando no demanden el apoyo económico”.
Luis Madrazo Bonilla, director municipal de Desarrollo Económico de Durango, comentó que debido a que el Gobierno del Estado no contaba con una entidad fomento que se encargara de administrar el Programa Mi Tortilla, optaron por utilizar un fondo municipal para evitar que los recursos se perdieran para Durango.
Dijo que el esquema ofrece elevar la competitividad de las tortillerías mediante una capacitación a la medida. Tras realizar la capacitación a los negocios participantes, Madrazo comentó que uno de los problemas constantes detectados fue la contabilidad de cajón con la que se manejan estos negocios, por lo que el empresario no sabe cuánto dinero ingreso o se gasto en el día.
Agregó que el esquema busca también reforzar el consumo por persona de tortilla, ya que durante los últimos años ha descendido.
