Trabajadores y vecinos de la empresa Tyson que resultaron intoxicados son atendidos por socorristas de la Cruz Roja.
Gómez Palacio, Dgo.- Una fuga de amoniaco en el área de rastro de la empresa Tyson, provocó la evacuación de poco más de 600 personas entre trabajadores y vecinos de las colonias Hamburgo, División del Norte y Abraham Rosales.
La fuga provocó además, intoxicación de primer grado en por lo menos 36 personas, las cuales fueron atendidas por socorristas de la Cruz Roja en el lugar de los hechos, otros más fueron enviados a la clínica 51 del IMSS y Hospital General, reportándose hasta el cierre de la edición que su estado de salud es estable.
Alonso Gómez Vizcarra, titular de Protección Civil Municipal, informó que el percance se registró aproximadamente a las 21:30 horas, momentos antes de que se realizara el cambio de turno donde laboraban más de 300 personas, las cuales fueron evacuadas de inmediato.
Según el funcionario, la fuga se presentó en el área de rastro de la empresa, luego de que una válvula de seguridad se botara por la presión del químico, lo cual generó una espesa nube tóxica que se extendió en cuestión de segundos sobre la factoría y las colonias adyacentes.
Al momento de la contingencia se activó el sistema de emergencia tanto para los trabajadores como para los habitantes de las colonias que colindan con la planta, siendo éstas: Hamburgo, División del Norte y Abraham Rosales, cuyos habitantes fueron trasladados en gran parte al estacionamiento de un conocido centro comercial, así como al Gimnasio Municipal Luis L. Vargas.
En el desalojo participó personal de Bomberos, Cruz Roja, Dirección Estatal de Investigación (DEI), Tránsito Municipal y Secretaría de Protección y Vialidad, quienes cerraron los accesos a la planta por la Prolongación Madero entre el bulevar Ejército Mexicano y Prolongación Vergel.
Hasta cerca de las once de la noche funcionarios de la empresa Tyson acompañados del titular de Protección Civil realizaron un recorrido por los sectores afectados por la fuga, luego de lo cual se dio la orden de que las familias regresaran a sus hogares.
Cuando se realizaba dicho recorrido un grupo de vecinos interceptó a los funcionarios de la empresa para reclamarles las constantes fugas, afirmando que en el transcurso de un año se han presentado tres contingencias.
La molestia de los vecinos no pudo ser más evidente pues además amenazaron con cerrar la planta definitivamente.