El presidente de Pakistán, Pervez Musharraf, negó ayer que tenga la intención de dimitir y aseguró que permanecerá en su país para seguir la cooperación con el primer ministro Yousuf Raza Gilni, porque dijo creer en la reconciliación.
El mandatario paquistaní rechazó ayer las versiones “infundadas” de la prensa local sobre su posible renuncia y posterior exilio, “que han provocado una fuerte incertidumbre entre la población”, reportó la agencia estatal de noticias APP.
“No dimitiré, no he decidido dimitir. Permaneceré en Pakistán. No tengo ninguna casa fuera de Pakistán. Las rumores de renuncia, los rumores sobre mi renuncia son falsos”, dijo Musharraf en rueda de prensa en la capital, Islamabad.
“Alguien divulgó que un avión aterrizó en Islamabad para sacarme fuera de Pakistán, pero ¿dónde está el avión? Alguien dijo que las fuerzas de seguridad han rodeado mi casa. Alguien dijo que saldré del país en un plazo de 48 horas. Es absurdo”, refirió.
Después de insistir en la falta de credibilidad de esas versiones, pidió a los representantes de los medios de comunicación detener y enfrentar a quienes están propagando los rumores, de acuerdo con los reportes de APP conocidos en esta capital.
“Soy presidente electo de Pakistán bajo la Constitución.
(Empero) juzgaré si tengo algún valor en el país, porque no puedo presidir la caída de Pakistán. No seré parte ciertamente de la caída del país”, puntualizó.
Pakistán está pasando por una situación muy difícil, dijo, y se refirió a la lucha contra los grupos armados musulmanes y la crisis económica.
Musharraf reiteró asimismo su compromiso de cooperación con el primer ministro y su Gabinete, y rechazó las acusaciones de los partidos de oposición de que la presidencia es “un centro de conspiración contra el nuevo Gobierno”.
“No hay conspiración en la Presidencia. Estoy realizando mis funciones bajo Constitución. No interfiero en los asuntos de Gobierno”, insistió al subrayar “he adoptado la política de reconciliación”.
Bicicleta-bomba mata a cuatro en Pakistán
Una bomba colocada en una bicicleta estalló en Pakistán y causó la muerte de cuatro personas, incluidos dos policías que revisaban el vehículo tras permanecer abandonado varias horas afuera de una casa, informó ayer el diario PakTribune.
La Policía de Dera Ismail Khan, la ciudad donde se produjo el atentado, admitió que se trató de una trampa, pues los agentes fueron enviados a la zona luego que por teléfono fue reportada una supuesta explosión que resultó ser falsa.
Ya en el lugar, una bicicleta con varias sandías en su canastilla llamó la atención de los policías, a quienes varias personas dijeron que estaba abandonada desde horas atrás.
Los explosivos fueron activados a control remoto cuando los agentes revisaban la bicicleta y buscaban a su propietario, lo que causó la muerte inmediata de dos de ellos y también de dos civiles, además de heridas a otras 12 personas.