Demandan a Barack cumplir promesas Ciudadanos estadounidenses de origen mexicano y familiares de inmigrantes se reunieron en el Hemiciclo a Juárez de la Ciudad de México, para pedir al presidente electo de EU, Barack Obama, cumplir sus promesas de campaña en favor a los inmigrantes. (Notimex)
El presidente electo de Estados Unidos, Barack Obama, no podrá visitar México hasta después de su primer año de Gobierno, ya que al iniciar su gestión tendrá que enfocarse con su equipo en sacar adelante su proyecto económico y enfrentar los efectos de la crisis que atraviesa el país.
Así lo afirmó en entrevista Steven Lucero, representante en México del grupo Jóvenes Demócratas, quien señaló que, a pesar de que Obama desde su campaña a la Presidencia externó su interés por nuestro país, “son escasas” las posibilidades de que efectúe a corto plazo una visita de Estado después de asumir el cargo el 20 de enero de 2009.
El representante de los demócratas en nuestro país consideró que “nadie debe esperar una visita pronto a México, no dentro de su primer año de Gobierno, ya que la crisis va a ocupar todo su tiempo, más aún cuando ahora está empeorando la situación”.
Lucero indicó que oficialmente el equipo de transición no ha elaborado una agenda en la que se haya descartado esta visita, sin embargo, dejó en claro que ante la gravedad de la situación económica que hereda.
Obama su prioridad será aplicar sus propuestas en la materia.
Sin embargo, señaló que la eventual presencia de Obama en México no afectará en ninguna medida la relación con ambos países y se continuará con la política de cooperación entre ambas naciones. De hecho, Steven Lucero señaló que en la medida en que la Administración de Obama atienda y enfrente la crisis económica.
“Esto también tendrá un impacto para los mexicanos, sin duda, por lo que se debe entender que el tema económico es prioritario en la agenda del presidente electo”.
El demócrata aseguró además que no se dejará de lado temas como el migratorio o los problemas de la comunidad latina en Estados Unidos, pues la Administración de Obama no olvidará el apoyo crucial que recibió de este sector y que se tradujo en casi 68% de los votos que lo llevaron a la Casa Blanca.
