Despiden a Newman a oscuras
EFE
Nueva York, EU.- Los teatros neoyorquinos apagaron ayer sus luces durante un minuto para dar su último adiós a Paul Newman, el actor estadounidense que falleció el pasado fin de semana y que pisó por primera vez un escenario de Broadway hace 55 años.
Newman, de 83 años, y una de las últimas leyendas de los años dorados de Hollywood destacó en su larga carrera por su talento y por su físico, murió de cáncer el pasado 27 de septiembre.
La Liga de Broadway, una asociación nacional que reúne a los teatros en esa popular área de Nueva York, emitió un comunicado en el que indicó que todos los teatros ubicados entre la calle Broadway y la plaza de Times Square apagaran sus neones a las 20:00 hora local (00.00 GMT) durante un minuto como homenaje al protagonista de películas como Exodus, Butch Cassidy and the Sundance Kid o El Color del Dinero.
“Broadway llora la pérdida de Paul Newman, un actor, director y filántropo universalmente admirado por sus actuaciones sobre los escenarios y en la gran pantalla”, agregó el comunicado.
Newman, que además de la gran pantalla, también gustaba de subirse a los escenarios teatrales debutó en 1953 en Nueva York, con la obra “Picnic”, en la que conoció a su esposa, Joanne Woodward, recordó la asociación teatral fundada en 1930.
Con su esposa, también actriz, actuó en el teatro comunal de Wesport (Connecticut), en donde la pareja se había instalado, lejos del ambiente de Hollywood.
El reconocido actor fue nominado a los premios Tony de teatro en 2003 por su actuación en la producción “Our Town”, de Thornton Wilder, que luego se convirtió en serie de televisión y por la que también recibió una nominación de los premios Emmy.
Actor versátil
Newman perteneció a la misma generación que Marlon Brando y James Dean, y, como ellos, fue al Actors Studio, bajo la dirección de Leo Strasberg, para encarnar en la pantalla a personajes complejos y atractivos que se enfrentaban a la dificultad de vivir y a la tentación de la autocompasión: “Ese deporte de interior que tanto suele gustar a la gente”.
Pocos hombres han sido más amados por las mujeres que ellos. Representan tres formas diferentes del imaginario amoroso femenino.
James Dean, el amor adolescente, el amor a esos novios que aún conservan el egoísmo y la locura de la infancia, y que suelen ser los que más las hacen sufrir; Marlon Brando, el amor al extraño, el amor a uno de esos hermosos desconocidos que nunca llegan para quedarse y en cuyas manos ellas se ponen sin preguntar. Y Paul Newman el amor al amigo, el amor a esos muchachos que crecen a su lado y que, a pesar de su inconstancia y su aire burlón, no dudarán en acudir en su ayuda cuando los necesiten: el amor que sabe pedir a la vida las cosas que te puede dar.