El ex presidente Vicente Fox Quesada se mostró indiferente ante las denuncias penales que obran en su contra en la Procuraduría General de la República (PGR), por los delitos de enriquecimiento inexplicable, genocidio y desaparición forzada de personas, en el estado de Oaxaca.
Este domingo el ex mandatario panista acudió a misa y al salir del Templo de la Purísima limitó sus comentarios sobre los conflictos legales en que está implicado. “Yo no pierdo ya mi tiempo en esas cosas”, enfatizó Fox.
“Nada, cero declaraciones como siempre, ya ven qué feliz soy últimamente no declarando”, dijo con desdén.
El 9 de julio, el diputado perredista Juan Guerra Ochoa, integrante de comisión especial de la Cámara de Diputados, presentó una denuncia ante la PGR para que se investigue al ex presidente por presunto enriquecimiento inexplicable, a su esposa Martha Sahagún y a los hijos de ésta Manuel y Jorge Alberto Bibriesca Sahagún.
En tanto, el 16 de junio el senador del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Salomón Jara Cruz, acusó al ex presidente de México, Vicente Fox y al gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz, por los presuntos delitos de genocidio y desaparición forzada de personas en Oaxaca durante el conflicto social del 2006.
En su trayecto del templo a la hacienda de San Cristóbal, el ex presidente mexicano destacó los logros recientes en el Centro Fox y de infraestructura de la comunidad.
El sábado, dijo, concluyó la primera generación del diplomado en Práctica Política con 45 alumnos y en breve se montará una exposición cultural con el apoyo del Gobierno de Egipto.
En las acciones de desarrollo comunitario comentó que están en proceso lo planos para la construcción de un hotel, aparte de los cuartos que los pobladores se edifican en sus casas. Dijo que continúan los trabajos de imagen como la instalación de una estatua en el acceso principal.
