Destrozado el 80% de red auxiliar de drenaje

Los tubos son de concreto, tienen más de 20 años de antigüedad y nunca han recibido mantenimiento.

El Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas) enfrenta un grave problema, pues ya no son los colectores generales los que se colapsan. El organismo diagnosticó ahora que 80 por ciento de las redes auxiliares del sistema de drenaje sanitario de la ciudad se encuentra prácticamente destrozado, pues son de concreto, tienen más de 20 años de vida y nunca han recibido mantenimiento.

Por ese motivo, durante los últimos meses se “ha generalizado la ‘caída’ de tramos de drenaje sanitario, pero los ‘caídos’ son líneas auxiliares o secundarias, son las que alimentan los colectores generales. La red de drenaje sanitario de la ciudad tiene una longitud de 800 kilómetros”, informó Luis Horacio Salmón, gerente operativo del Simas.

Si bien durante los tres últimos años el Simas ha invertido en la reposición de colectores generales alrededor de 38 millones de pesos para cambiarlos al material de polietileno de alta densidad y de un mayor diámetro para incrementar su capacidad de conducción, “ahora el problema al que nos enfrentamos es que la red de líneas auxiliares está prácticamente hecha garras”, afirma Salmón.

Y lo preocupante, agrega, “es que la situación pudiera rebasarnos y no hay recursos que alcancen para reparar todo lo dañado. Podemos hablar que se necesitan 800 millones de pesos a valor actual. Por eso lo más seguro es que nada más nos dediquemos el próximo año a apagar fuegos, es decir, reparar lo que se vaya cayendo”.

Explica que la totalidad de las redes auxiliares de los colectores principales es de concreto, “sin ningún tipo de recubrimiento epóxico. Al paso del tiempo han sido carcomidos por los gases de las aguas negras. Esa es la situación de todas las calles, de todas las colonias, donde me pregunten la situación es la misma”.

El arreglo de las redes auxiliares de drenaje sanitario, implica ahora “no parchar los tubos, sino cambiar tramos de tubos de concreto, viejos y carcomidos, a material de polietileno de alta densidad y de pozo de visita a pozo de visita”.

Durante la Administración de Guillermo Anaya, el Simas gestionó una línea de crédito por 64 millones de pesos vía el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), para la reparación de colectores.

Estos recursos fueron destinados a reparar sólo un 15 por ciento de la red de drenaje sanitario y posteriormente fueron objeto de dos auditorías, una de ellas por parte de la Contraloría General del Estado y otra externa a cargo del despacho González de Aragón y ordenada por el Congreso del Estado.

Durante los últimos tres años, el Simas ha invertido cantidades millonarias en reposición de algunos colectores principales pero ha sido más bien “por emergencias”, lo reconoce el gerente técnico.

En 2006 aplicó sólo 5 millones de pesos a la atención de colectores, ya que de su presupuesto de 90 millones, las prioridades fueron reposición de pozos y arreglo de tubería de agua potable en la zona Centro de la ciudad.

En 2007 invirtió 15 millones de pesos y este año, la suma fue 18 millones de pesos para reparar diversos tramos de colectores generales. Con estas inversiones, Salmón calcula que apenas se ha atendido un 15 por ciento de los colectores generales, pero nada en cuanto a las redes auxiliares.

Para el 2009, será hasta en enero cuando se conozca la inversión destinada a reposición de redes auxiliares de drenaje y una vez que el Simas distribuya su presupuesto.

Serio problema

Ahora son las líneas auxiliares del drenaje sanitario de la ciudad las que por viejas y carcomidas, están prácticamente destrozadas y en riesgo de colapso. Repararlas podría implicar una inversión de 800 millones de pesos.

· Recientemente se repararon varios tramos en el bulevar Revolución al oriente.

· También se reparó un tramo de redes auxiliares en Diagonal Reforma y calle 32.

· Por lo costoso de la inversión para reparar las redes de drenaje sanitario, el Simas sólo atenderá los casos de “emergencia”, es decir, lo que se vaya colapsando.

FUENTE: Gerencia Operativa del Simas