La hipertensión arterial es más frecuente en los hombres que en las mujeres, y entre sus factores de riesgo se encuentra la obesidad.
La enfermedad es conocida como el ‘asesino silencioso’ y es más frecuente en hombres, informa IMSS Coahuila.
Evitar el exceso de peso ayuda a controlar la hipertensión (elevación anormal de la presión arterial), enfermedad que registra un promedio de 900 nuevos casos cada mes en la delegación Coahuila del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Para la prevención de la hipertensión arterial es necesario comer frutas y verduras crudas; tomar de 1.5 a 2 litros de agua diarios; ingerir entre 25 y 30 gramos de fibras; consumir poca sal y, en menor frecuencia, alimentos industrializados, dijo Juan Francisco Irizar López, jefe de prestaciones médicas en la delegación del IMSS en Coahuila.
Sobre esta enfermedad, también conocida como “el asesino silencioso”, el funcionario explicó que es más frecuente en los hombres que en las mujeres, y entre sus factores de riesgo se encuentra la obesidad, identificada por la llamada “curva de la felicidad”, que podría ser el aviso de un posible trastorno y no sólo una cuestión estética visual.
Señaló que un factor de riesgo para los hipertensos es un elevado consumo de sal; el promedio que se ingiere es de 20 a 35 gramos diarios, y debe reducirse entre 10 y 15 gramos diarios a fin de mejorar el control de la tensión arterial.
Un paciente en primera fase de hipertensión, con seis gramos de sal puede ser controlado pero cuando sus niveles de presión y reducción de peso no responden, se pasa a una segunda fase de control sódico que va de 1.5 a 2 gramos de sodio al día.
El doctor Irizar López explicó que la mayoría de los casos de diabetes están asociados a inactividad física o antecedentes familiares de dislipidemias (alteraciones por triglicéridos), ocasionados por hidratos de carbono o azúcares en general contenidos en gelatina, caramelos, dulces, pastas, chocolates, colesterol y con otras enfermedades de tipo degenerativo como las cardiovasculares, diabetes mellitus, obesidad e insuficiencia renal crónica, sobre las cuales hay controles dietéticos para cada caso.
Cuando existen problemas de colesterol o sobrepeso, pueden ser controlados con ejercicio y con alimentación baja en grasas saturadas (contenidas en yema de huevo, carne de res, puerco o en piel de pollo, camarones, ostiones, jaiba, mantequilla, leche entera, mayonesa, manteca de maní, chocolates) y alta en ácidos grasos mono y polinsaturados (aceites de oliva, de maíz, cártamo, y nueces, almendras, cacahuates, pistaches), ya que las grasas malas se atacan con grasas benéficas, además de que el colesterol en sí no es malo mientras sus niveles no se incrementen y obstruyan la circulación de la sangre.
El doctor dijo que es necesario una combinación equilibrada de fibra soluble derivada de las frutas (manzana, pera, durazno, membrillo), cereales (avena cruda), y fibra insoluble. La primera sirve por su arrastre y efecto sobre los lípidos (grasas del organismo), mientras que la segunda sólo da movilidad intestinal y espacio gástrico.
Irizar López señaló que cada mes se registra un promedio de cuatro defunciones por padecimientos asociados con la hipertensión arterial, razón por la cual se deben extremar las medidas preventivas para evitar que se presente este padecimiento también conocido como “el asesino silencioso”.
Cómo combatirla
Para controlar la hipertensión arterial es necesario:
Bajar de peso.
Llevar una alimentación sana.
Hacer ejercicio.
FUENTE: IMSS