Anda sola, sin conductor, y no se cae ni aunque la pateen. Es la singular moto desarrollada por el israelí Uri Nenner, de 32 años, egresado del Politécnico de Haifa (Tejnion), donde estudió Ingeniera Mecánica y Civil.
Armado con un sueño, con la convicción de que lograría concretarlo y con el desafío de mostrar que tenía razón, Uri puso manos a la obra, soldando, armando y desarmando de una moto muy sencilla que alguien le facilitó. La meta: instalar en ella un sistema que controle la moto para que pueda viajar sin caerse, sin que nadie la conduzca montada en ella.
“Esto funciona, es indudable”, afirma y exhorta enseguida a mirar la filmación que lo comprueba, en YouTube, bajo el título “unamanned moto”.
Aclara de inmediato que si la moto pisa una gran mancha de aceite o choca fuerte contra algo, claro que perderá el equilibrio, pero ello, da a entender claramente, no quita significado a lo ya logrado.
Uri explica cómo abordó el tema. “Ante todo me senté a analizar las ecuaciones de movimiento en la dinámica de las motocicletas, algo uniforme en todas. Eso me llevó algunos meses”.
“Luego era necesario desarrollar un algoritmo de control, o sea la fórmula que me permitiera sustituir al conductor por una computadora que ordenara al motor cómo mover el manubrio, el acelerador y los frenos”.
Tras su análisis, entendió qué y cómo debía construir.
“La moto tiene sensores que saben indicar todo el tiempo cuál es el ángulo de inclinación de la moto respecto del suelo y de acuerdo con eso, 50 veces por segundo, la computadora hace cálculos basados en las ecuaciones de movimiento que analicé.
“Según eso da órdenes al manubrio, de modo que garantice que se mantenga su estabilidad y que si quiero que doble a la izquierda, lo haga, o para donde sea”.
Su satisfacción al ver la moto andar, doblar según las indicaciones que recibe, salvar ciertos obstáculos como una pequeña rampa, todo esto sin desmoronarse, es evidente.
Sin embargo, sabe que lo central sería concretar una segunda parte del sueño: utilizar el sistema que desarrolló, como base para un modelo de moto conducida, como toda moto “normal”, pero que tenga mucho menos probabilidades de caerse.