Sorprende a curiosos y vendedores ambulantes ver por el Centro Histórico a los Príncipes de Asturias. (Agencia Reforma)
Los Príncipes de Asturias acudieron ayer al Templo Mayor, ante la sorpresa de numerosos paseantes y comerciantes locales, quienes al percatarse de quiénes eran los distinguidos visitantes, se arremolinaron en el lugar para verlos de cerca.
Felipe de Borbón y Letizia Ortiz realizaron un recorrido por el museo de sitio, en el que se les mostraron piezas descubiertas recientemente y se les ofreció una explicación sobre el lugar descubierto en 1978, cuando se realizaban excavaciones de la Compañía de Luz para establecer cableado subterráneo.
La pareja real arribó al Centro Histórico alrededor de las 10:15 horas, por petición del Príncipe Felipe, pese a que la visita estaba programada para el mediodía.
Sonrientes, tanto él como Letizia saludaron de mano a algunas personas y con señas a otras, mientras posaban para las cámaras.
A esas horas, los rayos del sol causaron incomodidad en la princesa, quien en varias ocasiones se hizo sombra con la mano. No obstante, ambos dijeron haber disfrutado el recorrido. Un grupo de estudiantes intentó pedirles un autógrafo, pero no pudieron acercarse a ellos debido al estricto control de seguridad.
Los príncipes fueron atendidos por el titular del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), Sergio Vela. Fueron conducidos a una sala que no se encuentra abierta al público, en donde vieron también piezas que forman parte de un estudio especializado que realiza del Instituto Nacional de Antropología e Historia, las cuales luego serán incorporadas al acervo del museo.