RHCP
Hablar de los Red Hot Chili Peppers es fascinante, no existe fan de rock and roll que no se entusiasme con alguna rola de esta banda californiana. Empezando desde el estrambótico nombre que se cargan, este cuarteto puede presumir, cosa que dudo que vayan hacer, de ser un grupo que no suena a ninguno otro, que su estilo es muy definido pero no por eso repetitivo y por lo tanto cansado, y que en cada disco tratan de proponer en vez de reciclarse eternamente, en pocas palabras tienen personalidad.
¿Que cómo definir su música? Funky, psicodélico, alternativo, algo de hard rock o punk, es difícil etiquetarlo, sólo se puede decir que se goza por su espíritu humanista, que es de donde radica su verdadero arte. A todos nos da risa su música bromista dentro de su primera etapa profesional (que abarca los discos The Red Hot Chili Peppers, Freaky Style, The Uplift Mofo Party Plan), en donde en sus videos se ve el rostro infantil de indio americano moderno de Anthony Kiedis y los gestos de universitario desmadroso de Flea.
En estos años la propuesta estaba orientad hacia una música funk rock psicodélica basándose en el bajo de Flea y con letras no muy serias. El guitarrista de la banda, Hillel Slovak, muere de una sobredosis a los 26 años de edad y Jack Irons deja su puesto de baterista, entrando al quite por él Chad Smith, baterista con el que Flea sintió de inmediato la química que debe de existir entre bajista y baterista para que todo grupo funcione como Dios manda.
Por el fallecido guitarrista entra a la banda John Frusciante, un joven de 19 años, ocho años menor que el promedio de edad del resto de la banda, para así de esta forma grabar con la nueva alineación Mother’s Milk en 1989, álbum de transición hacia la madurez de la banda y en donde cosechan sus primeros éxitos comerciales dentro de la industria musical, como lo fue el cover de Stevie Wonder Higher Ground y la pieza Knock Me Down.
Llega 1991 y con esta la última etapa gloriosa del rock, con su avalancha de discos que quedaron para la historia, incluyendo Blood Sugar Sex Magic, álbum con el que los Chili Peppers entran a las grandes ligas, no sólo comercialmente sino también artísticamente, al presentarnos letras muy personales y un sonido mas maduro gracias a la intervención de Rick Rubin en la producción.
De aquí escuchamos canciones como Give it Away, producto de jam entre los músicos, y un clásico de clásicos, Under The Bridge, un himno al espíritu de los Angelinos. Frusciante deja a la banda para convertirse en un adicto de tiempo completo y su lugar lo toma Dave Navarro, el cual siento que nunca se acopló al grupo tanto personal como musicalmente a pesar de ser en teoría más que un guitarrista perfecto para la banda, una personalidad perfecta para la imagen visual del grupo.
En 1995 editan One Hot Minute, bueno a secas y con la palpable ausencia de algo que no sabes que es y que por lo cual no termina de cuajar el disco. En 1999 lanzan al mercado Californication, con el cual Frusciante regresa al grupo, después de pasar sus veinte consumido por las drogas duras, presentando con su guitarra una atmósfera nostálgica, como de alguien que de verdad ha sufrido mucho pero no lo comenta, rodeando el sonido de Californication de una cierta sensibilidad espiritual con el cual se ha desarrollado la banda hasta la fecha.
Aquí esta la obra maestra del grupo y piezas como Scar Tissue o Other Side quedan como grandes expresiones de la humanidad de finales del Siglo XX. En 2002 presentan el álbum By the Way, con diversas texturas musicales que lo consolidan como un disco respetable, y del cual jamás me cansare de escuchar Can´t Stop y la simpática melodía titulada en español Cabron.
Stadium Arcadium es la última obra de RHCP, una especie de hermano menor del disco Californication y que resulta ser una joya por donde quiera que se le escuche, y en donde la guitarra de Frusciante da calor a un disco doble hecho para sentirse bien. Por lo pronto el futuro pinta bien para la banda, que sabe que en Frusciante tiene a un guitarrista de esos que tocan fibras y que sobre todo tiene ganas de seguir creciendo musical y personalmente.
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