Marco Antonio “Veneno” Rubio y Enrique Ornelas dieron el peso en Atlantic City, por lo que la pelea de eliminatoria mundial de peso medio será oficial. (Cortesía Chris Farina/Top Rank)
Dice el refrán que la tercera es la vencida y esto buscará hacerlo efectivo el púgil lagunero Marco Antonio “Veneno” Rubio, cuando enfrente esta noche en el Boardwalk Hall de Atlantic City, Nueva Jersey, al californiano Enrique Ornelas.
La pelea será eliminatoria para disputar el título de peso medio del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) que ostenta el norteamericano Kelly “Fantasma” Pavlik, el cual encabeza el pleito estelar de la función denominada “Imparable”, en su contienda ante el veterano Bernard Hopkins. En la ceremonia de pesaje, Rubio registró 159 libras, una por debajo del mínimo requerido, mientras que su rival, oriundo de Guanajuato, marcó 160 libras (72.575 kilogramos), por lo que el choque fue debidamente aprobado por el CMB.
El “Veneno” tiene antecedentes desfavorables cuando disputa una eliminatoria de título mundial, ya que hace cuatro años en el MGM Grand de Las Vegas cayó en apenas 33 segundos frente al ghanés Kofi Jantuah, en peso superwelter.
En el mismo escenario en 2006, sucumbió por decisión dividida en 12 asaltos frente al ugandés Kassim Ouma, donde los jueces Jerry Roth con 111-116 y Bill Graham 110-117 lo vieron caer, mientras que Dalby Shirley le dio un favorable 114-113, el lagunero mandó a la lona al africano en el primer round, pero no pudo finiquitar el duelo.
El de Torreón registra en 47 peleas, 42 victorias (37 KO’s), cuatro derrotas y un empate, en tanto que Ornelas en 32 choques, tiene 28 triunfos (18 KO’s) y también cuatro descalabros. La pelea irá en vivo por HBO en Pago Por Evento en Estados Unidos y en Dish Network en México a partir de las 20:00 horas.
El choque estelar de la velada, Kelly Pavlik va por más que un nocaut, cuando enfrente a Bernard Hopkins. Su misión es ponerle fin a la carrera de su oponente. El “Fantasma”, de 26 años, arriesgará su récord perfecto contra el veterano de 43 años.
, en una pelea a 12 asaltos.
La pelea, en la que no habrá título en disputa y que se realizará en las 170 libras (77 kilos), enfrenta al campeón mundial del peso mediano contra un púgil en la recta final de su carrera, que dominó esa división durante una década antes de ganar el título del peso semicompleto.
Pavlik siempre ha sido espectacular sobre el cuadrilátero. Con un ataque incesante, tiene 30 nocauts en 34 peleas. Pero conseguir uno contra Hopkins será difícil, ya que el boxeador de Filadelfia, con récord de 48-5-1, nunca ha perdido por nocaut, y apenas ha caído a la lona en dos ocasiones, ambas ante el ecuatoriano Segundo Mercado el 17 de diciembre de 1994 en un combate en la altura de Quito.
Los puños de Pavlik pueden tener un efecto similar a la altura, aunque Hopkins siempre ha sido uno de los púgiles con mejor defensa en el deporte. Hopkins asegura que la edad no importa, y recordó que Lance Armstrong volverá al ciclismo a los 37 años y Brett Favre es uno de los mejores quarterbacks de la NFL a los 39.
Hopkins llega al combate después de perder en abril contra Joe Calzaghe, en su única pelea del año. Ha perdido tres de sus últimas cinco, incluyendo dos contra Jermain Taylor en 2005. En el 2006 subió de categoría a los semicompletos y derrotó a Antonio Tarver. Al año siguiente, le ganó a Winky Wright.
Mares siempre no
El pasado jueves, un doctor de Los Ángeles encontró que Abner Mares tiene problemas en los ojos, como sucedió en el pasado con el argentino Jorge “Hiena” Barrios (fue operado) y también harán lo mismo con el olímpico mexicano en Atenas 2004.
Es por esta razón que no tendrá actividad este fin de semana en Atlantic City, bajo el respaldo de Pavlik-Hopkins. Se hizo todo lo posible para que Mares tuviera acción, pero desafortunadamente la lesión en los ojos lo dejó fuera.