Un jovencito de 18 años murió por una herida de bala que recibió durante una riña en la colonia Nueva Merced. Sus padres donaron sus órganos y en la Policía Ministerial se informó que ya está ubicado el presunto responsable.
Francisco Javier Hernández Macías, de 18 años de edad, tenía su domicilio en la colonia Rincón la Merced de esta ciudad y su verdugo fue identificado como César Márquez Valles, de 22 años, vecino de la colonia Cinco de Febrero.
Sobre los hechos ocurridos la noche del martes 11 de marzo, se informó en la sala de guardia de la Dirección General de Seguridad Pública Municipal (DGSPM), que Hernández Macías fue agredido poco después de las diez de la noche.
La riña se presentó en la confluencia de calle Eucalipto y avenida Los Vagones, por un grupo de sujetos que viajaban a bordo de un vehículo, del cual se ignoraban sus características.
Paramédicos de la Cruz Roja que acudieron hasta dicho lugar, levantaron al lesionado y lo trasladaron al Hospital General Universitario a donde también acudió el agente del Ministerio Público de Delitos contra la Vida y Salud de las Personas.
El estado delicado de salud del joven que tenía la herida de bala en la cabeza, obligó a que pronto se determinara su muerte cerebral y sus padres decidieron donar su corazón, córneas y otros órganos.