Los elementos de madera hacen más cálida cualquier decoración. (El Universal)
Además de crear finas piezas de arte mexicano decorativo, los realizadores lo hacen con materiales renovables.
A pesar de la vanguardia que define hoy en día al diseño de interiores, hay quienes siguen promoviendo la tradición artesanal para darle a los espacios la calidez necesaria. De esta forma, algunas empresas mexicanas le dan el justo valor a lo hecho a mano y así lo muestran en sus creaciones.
Una de estas es Alfonso Marina, firma que trabaja la ebanistería, oficio que ha sobrevivido a las modas y al paso del tiempo para permanecer en el gusto de la gente que aprecia el fino trabajo de la madera.
“Alfonso Marina arrancó en 1971. Era un taller chico y fuimos creciendo. Siempre hemos creído que lo que hacemos está vigente, pero que hay que irse adaptando para responder a las nuevas exigencias. “Las artes decorativas son un complemento que pretende agregar calidez a los ambientes, sin dejar de lado las tradiciones”, dice Carlos Marina, director de la fábrica.
La meta de esta empresa, que actualmente estrena la ampliación de su show room en Bosques de las Lomas, es ofrecer piezas sobresalientes para un estilo de vida refinado y casual. Su línea es ecléctica con influencias de diversas épocas, lo que da como resultado piezas con identidad propia y un gran valor artístico.
“Tenemos armarios pensados para una televisión de plasma con una pantalla de 50 pulgadas, con elementos inspirados en la época del virreinato, es decir, ofrecemos funciones modernas con formas clásicas”, afirma.
Comedores, salas, sillas y mesas, entre otros objetos, destacan con estilo único y elegante para todos los gustos.
Madera con conciencia
-La empresa Alfonso Marina toma muy en cuenta el potencial daño a la ecología. “Tratamos de usar maderas que no están en peligro de extinción, como la caoba; otra que usamos es la primavera, que es de un árbol que puede ser maderable antes de 30 años.
-La otra cuestión es que empleamos chapas de diferentes tipos (tejo, ébano, palo de rosa, cedro), esto nos permite usar láminas de fracciones de milímetro de grosor, entonces el rendimiento que da una chapa es mayor al de la madera sólida”, explica Carlos Marina.
Maestros
La firma Alfonso Marina acaba de lanzar una selección de hermosas arquetas (cofres pequeños) con influencias de los siglos XVII y XVIII del arte mexicano decorativo.
Éstas reflejaban la estética mudéjar, que tiene base en la utilización de madera preciosa con aplicaciones de hueso, concha de tortuga y ferretería rústica forjada. Con el tiempo y el desarrollo de la relación comercial entre España y el lejano oriente, las formas geométricas primitivas de las arquetas fueron influenciadas por el estilo barroco. Cuando los profesionistas de la madera se establecieron en Puebla, empezaron a usar materiales más caros para las cajas como marfil, ébano y plata.
Las arquetas de Alfonso Marina son de marquetería, algunas son pintadas, otras de carey y hueso. Un porcentaje de las ventas de estas arquetas será donado a la fundación MexFam, dirigida por Monchita Cosío.
