El pasado viernes 25 en el Teatro Nazas, tuvimos la oportunidad de escuchar un concierto que estuvo especialmente dedicado a los niños. La velada inició con el sublime Rondó para piano en Re mayor K. 382 de Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791), el cual fue compuesto en 1782 para darle un nuevo final a su Concierto para Piano No. 5 en re menor K. 175, el cual data de finales de 1773. Debo confesar que esta deliciosa partitura es desde mi niñez una de mis favoritas por la alegría que emana de sus notas. Sergio Vázquez asumió el papel solista, brindándonos una excelente interpretación de la parte correspondiente al piano, mientras que por su parte la Camerata de Coahuila ejecutó dicha partitura con su habitual maestría.
Probablemente uno de los más talentosos seres humanos de la historia ha sido Camille Saint-Saëns (1835-1921), pues no sólo fue un niño prodigio del piano y precoz compositor, sino también un destacado matemático, un notable filósofo que en muchos sentidos planteo ideas que más adelante serían expresadas por los existencialistas, un inspirado poeta y un hombre que se interesaría por la biología, arqueología y la geología.
También fue una persona con un desarrollado sentido del humor, el cual expresó a través de una serie de brillantes caricaturas y más notablemente con su extraordinario Carnaval de los Animales. Obra con la que concluyó la primera parte del concierto. Saint Saëns la escribió en 1886, cuando contaba con 51 años.
Este desfile fantástico de animales fue compusto como regalo sorpresa para el violonchelista Charles Joseph Lebouc (1822-1893). La partitura permaneció inédita - con excepción del Cisne - durante la vida del gran compositor francés por orden expresa suya. La Camerata de Coahuila ejecutó de manera espléndida esta obra, asumiendo con gran éxito las partes pianísticas Mariana Chabukiani y Sergio Vázquez. La narración fue realizada con un encantador ingenio, humor y acierto por el filósofo y conferencista Miguel Ángel García, quién demostró que además de ser una persona de gran talento es un excelente actor.
Después del intermedio se tocó otra obra de Saint-Saëns, el delicioso Pastel de Bodas, un vals-capricho que compuso en 1885 para celebrar la boda de su amiga, la pianista Carolina Montigny-Rémaury. Esta partitura fue espléndidamente ejecutada por la orquesta. Por otro lado, Mariana Chabukiani tocó con gran virtuosismo y musicalidad el piano.
El concierto concluyó con el célebre cuento musical “Pedro y el Lobo” que Sergei Prokofiev (1891-1953) compuso en 1936 por encargo del Teatro Infantil de Moscú y cuyo propósito es introducir a los niños a los diferentes instrumentos musicales. Prokofiev ya había escrito anteriormente dos cuentos musicales: “El patito feo” de 1914 y los “Cuentos de la abuela” de 1918, sin embargo ninguna de estas dos obras es tan efectiva o alcanza a generar el placer que produce “Pedro y el lobo”. Esto tal vez es resultado de la complejidad de su partitura, y de la manera en que se incluye la narración.
Es justo mencionar que el pasado viernes escuchamos una interpretación en la que se dio una perfecta interacción entre el narrador y la orquesta. Por otra parte, cabe destacar que en buena medida el éxito del concierto fue resultado de la espléndida dirección que realizó el maestro Shade.
Esperamos que la ejecución de estas obras se convierta en una tradición anual, y que la Camerata las incluya en sus giras, para que los niños de Coahuila tengan la oportunidad de disfrutar de estas partituras que fueron concebidas específicamente para ellos.
GLOSARIO MUSICAL:
Rondó: Composición musical cuyo tema se insinúa o se repite varias veces.
K.: Abreviatura de Koechel, al que le sigue un número del catalogo que Ludwig von Köchel (1800-1877) compiló de las obras de Mozart, el cual las ordena en forma cronológica.
