En las últimas horas se registraron diez crímenes en cinco estados de la República; en Tamaulipas, una mujer fue asesinada junto a su hijo y su nieto.
Los cuerpos fueron localizados en el canal Rodhe, Reynosa; tenían visibles huellas de tortura e impactos de bala. La Policía Ministerial del Estado (PEI) identificó a las víctimas como María del Carmen Rangel Velazco, de 61 años; su hijo Arnulfo Acuña Rangel de 33 y su nieto Felipe Reyes Rangel de 19 años.
Con este triple homicidio son ya cuatro personas asesinadas en dos días en Tamaulipas y halladas en el mismo canal, pese al gran despliegue de fuerzas federales y militares.
En Oaxaca, bajo el puente número dos de Guichivere, fue encontrado el cadáver de un hombre que tenía las manos atadas con cinta adhesiva y los ojos cubiertos con el mismo material, informó María del Carmen Chiñas, subprocuradora de justicia en el Istmo de Tehuantepec.
La víctima, que hasta el momento permanece en calidad de desconocida, fue ultimada de al menos dos balazos en la cabeza.
Este es el primer ejecutado que las autoridades de Justicia localizan en la región del Istmo, donde el año pasado el número de asesinados por el crimen organizado ascendió a más de 15.
Por otra parte, en La Trinitaria, Chiapas, un hombre fue ultimado a balazos en el poblado El Progreso, cerca de la frontera con Guatemala.
El cadáver, que no ha sido identificado, fue hallado entre matorrales por elementos del Ministerio Público, que recibieron el reporte.
En Chihuahua, ayer fueron ejecutadas tres personas en hechos relacionados con el crimen organizado. Con armas .9 milímetros, los homicidas le dispararon a la víctima en 15 ocasiones, incluyendo el tiro de gracia, según reportes policiacos.
Dos ejecutados más fueron localizados por las autoridades en el municipio de Uruachi, zona alta de la sierra Tarahumara, donde se da la siembra de drogas como la mariHuana y la amapola. Ahí asesinaron a balazos a Juan José Magallanes Leyva, de 25 años, y Pascual Félix Luna, de 18.
Además, los cuerpos de dos hombres fueron localizados envueltos en cobijas, con signos de tortura y el tiro de gracia en el municipio fronterizo de Nogales, Sonora.
La Policía Estatal Investigadora informó que el reporte del hallazgo se hizo al C4, donde se indicó de los cuerpos tirados en el basurón del Manantial, a espaldas del fraccionamiento del mismo nombre, al poniente de Nogales.
Los dos hombres aún no han sido identificados.
