Guillermo Colmenero muestra cómo realiza las nuevas piezas que expondrá para el mes de febrero de 2009. (Fotografía de Sergio Reyes)
Para Guillermo Colmenero la escultura es un medio de autoconocimiento en el que debe dominar al material antes de que éste lo domine.
Si ha visitado algún casino de Las Vegas, seguramente ha conocido la obra del lagunero Guillermo Colmenero, que durante una parte de su trayectoria se dedicó a realizar varias de las propuestas escultóricas que es posible ver en dichos lugares y hoteles de esa ciudad de Estados Unidos de América.
Pero ahora, su trabajo puede ser apreciado aquí en Torreón, pues Colmenero ya es un habitante de La Casa del Artista “Ana Mary Bringas de Martín”.
Explica el creador que el amor por el arte le viene desde niño: “Yo creo que un artista empieza a veces por sus circunstancias, si tu papá fue escultor o tiene algo que ver con el arte pues es más fácil que entres en ese ámbito. Y yo en lo personal, desde pequeño tuve la habilidad de hacer figuras de plastilina, comencé jugando como todos los niños, pero con cierta habilidad para hacer algunas cosas, de hecho mi mamá fue uno de mis principales apoyos, fue la que siempre me apoyaba y decía: ‘cuando mi hijo crezca va a ser escultor’”.
Luego, Colmenero comenzó a experimentar con los materiales: “Fíjate que durante mi adolescencia hice algunos trabajos en madera, pero durante ese periodo no era algo que tuviera mucha seriedad, más bien era trabajar la madera o el material y sacar algo como un regalo para mi mamá o mi papá”.
La ruptura entre el ‘hobbie’ y la profesionalización de su oficio se dio cuando Colmenero viaja a Estados Unidos y se le da la oportunidad de perfeccionar su trajo escultórico en la práctica: “Después de irme a Estados Unidos entré a estudiar allá a la universidad, y de ahí me tocó ver exhibiciones, obras, y de ahí despertó en mí un geniecito que fue el que me movió todo, y luego comencé a trabajar para una compañía en la que hacen esculturas para los casinos de Las Vegas, yo tenía 21 años en ese entonces, yo era uno de los escultores más jóvenes ahí, había dos escultores rusos, dos americanos y yo, éramos cinco, y ahí empecé a trabajar ya en forma más seria, y hacíamos además otra serie de esculturas para un catálogo, ésas eran ya de temas más libres, ya yo empecé a hacer mi propia obra ya para exhibiciones”.
UN ENCUENTRO INTERIOR
El siguiente paso decisivo para Guillermo en el camino de la escultura fue un curso con maestros africanos acerca de la escultura en piedra, pero se dio cuenta de que cada material tiene una magia y una química muy personal con cada ser humano: “Aprendí escultura con ellos, y fue una experiencia tremenda, es decir, la escultura en piedra te cambia, te cambia hasta tu persona, porque tú piensas que vas a ir a esculpir la piedra, a manejarla y a dominarla, y resulta que es por el contrario: la piedra te termina dominando a ti por el esfuerzo que se toma en sacar una obra, es difícil y tedioso, por toda la lijada y la pulida que le tienes que dar a mano, muchas veces te termina en cierta forma dominando y modelando a ti”.
Luego de esta dura etapa, el escultor viajó a Monterey, California: “Ahí estudié en un taller de maestría en escultura figurativa -para el cual ya debías saber algo- mandé mi currículo, fotografías de la obra y me aceptaron, tomé ese curso y es el mismo que ahora estoy impartiendo aquí en La Casa del Artista”.
Además, parte de la obra de Guillermo Colmenero es posible observarla en la reciente muestra de La Casa del Artista titulada Bos Taurus, al lado de Héctor Moreno y Miguel Espino que se exhibirá todo el mes de noviembre; y ya trabaja en una nueva serie que se inaugurará en Gómez Palacio “esto será en febrero, pero yo voy a presentar unas bailarinas, estilizadas, alargadas con una forma ‘esqueletónica’, con cara en forma como de esqueleto, ésa es la idea que me da, pero el Día de Muertos siempre va en mi obra de una forma u otra”.
Para aprender...
Guillermo Colmenero imparte un curso permanente de figura humana en La Casa del Artista.
■ Días: Martes y jueves.
■ Horario: 4:00 a 6:30 de la tarde.
■ Lugar: Casa del Artista, ubicada en bulevar Independencia número 220 Ote.
■ Informes al teléfono: 793-04-05.
