MÉXICO, DF.- La falsificación de billetes va en aumento. Los de mil pesos son los que observan la más alta predisposición al casi triplicar la emisión de papeles apócrifos en sólo un año y a pesar de contar con la mayor gama de medidas de seguridad.
Información del Banco de México y de la Asociación de Bancos de México (ABM) muestran que por cada millón de billetes de mil pesos que circulan en el país, cerca de 130 son falsos, cuando en 2005 apenas había 50 por cada millón.
De acuerdo con el Artículo 234 del Código Penal Federal, la falsificación de billetes y monedas se castiga hasta con 12 años de prisión.
La ABM informó que ante el explosivo aumento de este ilícito, el Banco de México pidió a las entidades bancarias su colaboración para colocar carteles alusivos en las sucursales, en los que se detalla el proceso que el cajero debe seguir al momento de detectar un billete ficticio.
Una vez que se descubre papel moneda falso, el empleado debe retenerlo y por ningún motivo podrá marcarlo, destruirlo o perforarlo. A cambio de la pieza, tiene la obligación de entregar un recibo al usuario.
Cada unidad en billete o moneda que se detenga debe ser enviada al Banco de México para su análisis; si ésta resulta auténtica, la institución debe reembolsar al cliente el importe, previa entrega de recibo, pero si es falsa, no podrá recuperar el numerario. En cualquiera de los dos casos, el intermediario financiero tendrá que informar al usuario el resultado del dictamen.
Los más clonados
El Banco de México detalló que el billete que más se copia es el de 50 pesos, con 215 papeles por cada millón, y el de 200 pesos con 106 por cada millón en circulación.
Los elementos de seguridad que se deben tomar en cuenta para verificar la autenticidad de la moneda son: el papel algodón en el caso de las denominaciones de 100, 200, 500 y 1000, impresión con relieve y tinta que cambia de color, banda o confeti iridiscente, marca de agua, registro perfecto de imágenes, hilo de seguridad, hilo y texto microimpreso, fondos lineales y tinta fluorescente.
El Banxico especificó que los billetes originales se elaboran con procesos de impresión especial, por lo que se podrá sentir el relieve al tocar con la yema de los dedos el personaje, la leyenda “Banco de México”, la denominación y el recuadro de tinta ópticamente variable; este último, sólo en los de 100, 200, 500 y 1000 pesos.
Una encuesta telefónica que levantó el Banco de México en 2006, reveló que 28.8% de las personas siempre revisa la autenticidad de los billetes; 12.7% lo hace con frecuencia; 15.5% respondió que pocas veces y 21.2% aseguró que nunca.
Destacó que una de las acciones para combatir la falsificación es la capacitación a intermediarios financieros, autoridades de procuración de justicia, entidades gubernamentales, compañías y al público en general.
