Para muchos mexicanos el teléfono celular es una herramienta de trabajo. Es a través de este equipo móvil que sus clientes los contactan para solicitar sus servicios, e incluso es la única forma de encontrarlos.
Los equipos móviles se convierten en un aparato fundamental para la realización de oficios.
Para muchos mexicanos el teléfono celular es una herramienta de trabajo. Es a través de este equipo móvil que sus clientes los contactan para solicitar sus servicios, e incluso es la única forma de encontrarlos.
El teléfono móvil no sólo dejo de ser accesible y útil para profesionistas y personas con alto poder adquisitivo desde hace algunos años, sino que se ha convertido en un aparato del que trabajadores como plomeros, electricistas, carpinteros o taxistas, entre otros, no pueden prescindir para tener empleo.
“Un celular se tiene que comprar como cualquier cosa que a uno le hace falta, mas para el trabajo, por eso lo uso. Es de mucha utilidad aunque sí sale un poquito caro pero se compensa con el trabajo”, dice Jesús Salazar Martínez, quien se dedica a la carpintería y desde hace 8 años tiene el mismo equipo.
Para él, este aparato es la única forma de estar comunicado con sus clientes y familiares, pues en su casa no tiene un teléfono fijo. Asegura que en un día puede recibir hasta tres llamadas de clientes, pero en general son 5 a la semana.
De la misma forma, Raúl Olvera Jiménez, electricista y José Manuel del Río, plomero, coinciden en que desde que tienen un celular reciben más solicitudes de sus servicios, sobre todo de emergencias.
Este fenómeno ha generado que el 49% de los mexicanos que pertenecen a los niveles socioeconómicos D y E, en los que el ingreso máximo por familia es de máximo 6 mil 800 pesos, tenga un teléfono celular, de acuerdo con un estudio de The Competitive Intelligence Unit (CIU).
Y es que en gran parte de estos hogares no sólo un integrante es el que cuenta con un móvil, sino que otros miembros, principalmente los jefes de familia y los hijos mayores de 15 años también cuenta con su propia línea celular.
José Manuel del Río, plomero, Raúl Olvera, electricista, Jesús Salazar, carpintero, Bernardo Blas, guía de turistas y Oscar Conde Villagran, taxista, aseguraron que en su familia todos tienen celular. Sus hijos sólo lo usan para comunicarse con sus amigos.
Los analistas aseguran que las consistentes reducciones en los precios y las estrategias de los operadores por atacar los segmentos de menor poder adquisitivo con el fin de ampliar su mercado han permitido que el servicio telefónico celular permee hacia estos estratos económicos, en los que la rotación de los equipos es más común.
“A mí me lo regaló una de mis hijas, pero si no yo lo hubiera comprado porque es muy importante para que mis clientes me llamen y para hablar con mis hijos y mi esposa. Yo le meto una tarjeta de 100 pesos cada 15 días o cada 8 días, depende”, dijo José Manuel.
“Yo tuve que comprar mi celular, he tenido sólo uno, tengo con él desde 1998, con fichas, como es mi número no lo puedo cambiar porque todos mis clientes tienen ese teléfono y si lo cambio tengo que volver a hacer tarjetas y volver a buscar a todos mis clientes, y puedo perder clientes”, comenta Raúl.
“Es mi herramienta de trabajo en todo el país porque voy a muchos estados y le hablo al operador del autobús para decirle en que tiempo debe estar ahí por el grupo de turistas que llevo. Uso celular desde que era el tabicón, también fui taxista ecológico y me sirvió porque en la noche no me asaltaban porque así trabajaba con clientes que así me localizaban y yo iba por ellos”, dice Bernardo Blas, guía de turistas.
“Tengo celular desde hace 4 años. También tengo fijo en mi casa.
Lo compré para que me hable mi familia me localizan, es muy práctico”, indica Oscar Conde Villagrán.
Más trabajo
“Me contactan mas clientes desde que tengo celular, es mas fácil para las personas hablarme que venir hasta acá. Tengo el mismo desde 1998 y no lo cambio porque pierdo clientes”.
Raúl Olvera Jiménez, Electricista
Compensatorio
“El celular es lo que se usa más ahorita y me ha funcionado. Sí sale un poquito caro pero se compensa con el trabajo”.
Jesús Salazar Martínez, Carpintero
Llamada cara
“Mis clientes me contactan a mi celular, me lo regaló una de mis hijas, pero hay veces que el cliente no le quiere hablar porque es cara la llamada, tendría que ser muy urgente, pero si hago buen trabajo me recomiendan y me hablan”.
José Manuel del Río, Plomero
Por mensaje
“Es necesario el celular para mi trabajo. Al mes gasto como 500 pesos de tiempo aire y casi lo manejo mas por mensaje”.
Bernardo Blas, Guía de Turistas
Llamadas gratuitas
“Gasto poco, como 30 pesos al mes. Porque tengo llamada gratuita al celular de mi esposa y a ella es a quien más le hablo”.
Oscar Conde Villagrán, Taxista
