El operativo inició en la noche y concluyó hasta ayer por la mañana con la ráfaga de fuego que alertó a los soldados y así fue como llegaron al lugar. No se presentó ningún enfrentamiento.
Además de las plantas se encontró semilla de marihuana, vehículos y una arma larga
Una ráfaga de un “cuerno de chivo” alertó a los soldados de la Décima Zona Militar. Fue esa señal para encontrar el invernadero llamado Agua Nueva, ubicado en Yerbaniz, municipio de Peñón Blanco. En ese lugar fueron encontradas dos mil plantas de diversos tamaños de marihuana y nueve mil 600 de almácigos del mismo enervante, además de una infraestructura para albergar a más de 20 personas.
LOS HECHOS
Elementos del Ejército Mexicano realizaban una investigación de campo en donde ubicaban por la zona un lugar en donde producían el enervante. El operativo inició en la noche y concluyó hasta ayer por la mañana con la ráfaga de fuego que alertó a los soldados y así fue como llegaron al lugar. No se presentó ningún enfrentamiento.
El sol estaba saliendo cuando se empezó a revisar la zona, en total seis galeras producían el enervante. Sus ocupantes según lo observado acaban de dejar el lugar, ya que se encontraron huellas de vehículos en los cuatro caminos que están conectados a la carretera.
RECORRIDO
Horas más tarde del hallazgo el comandante de la Décima Zona Militar, Moisés Melo García, convocó a rueda de prensa en el lugar, a donde se invitó a los medios de comunicación a ver el invernadero que habían encontrado.
En una de las galeras se encontraron dos mil plantas de una altura de 30 centímetros, había matas “madres” de tres metros, el sistema de riego era por goteo y recibían calor a través de focos. Todo este procedimiento era para acelerar el crecimiento de la hierba.
También se encontraron nueve mil 600 almácigos del enervante, además de cinco kilos de semilla de marihuana, siete kilos de marihuana molida y tres kilos en greña.
El lugar donde está el invernadero ocupaba cerca de diez hectáreas, pero en total todo el terreno abarcaba 25 hectáreas. Por la infraestructura se estima que tenía dos años de haberse instalado.
SITUACIÓN
Una de las presunciones que tiene el Comandante es que después del hallazgo de la semana pasada de los ocho invernaderos en Pánuco de Coronado, los trabajadores empezaron a sacar el enervante, ya que solamente en una de las galeras había marihuana, en el resto se percibía que las habían arrancado para transportarlas y llevarlas a otro lugar.
También se especula que las personas que cuidaban este lugar querían incendiar la galera en donde fueron encontradas las plantas ya que había diesel regado por los pasillos.
INFRAESTRUCTURA
Había una planta de luz con la cual bombeaban el agua para que llegara a los invernaderos, además del uso para uso personal. Se tenían esponjas grandes que servían como colchón para los peones.
El camino lleno de polvo característico del semidesierto cubría algunas latas de cervezas que había por todo el campo, donde se llegaron a ver algunas semivacías, señal de que acababan de dejar el lugar.
Había un comedor donde se presume que empaquetaban el enervante y la semilla. En ese lugar también fue encontrado el “cuerno de chivo” junto con cartuchos útiles.
En una de las habitaciones estaba un busto de San Judas Tadeo, además de bolsas para empaquetar el enervante, botas, ropa, cobijas, comida y latas de cervezas vacías.
La camioneta de tres toneladas no tenía placas de circulación ni la cuatrimoto, las camionetas pick-up, una de marca Mazda y otra Nissan, la primera con placas de circulación FP 31940 y la segunda con FR 43668 del estado.
A un kilómetro de las galeras se encontraron otros dormitorios, en uno de ellos se tenía sistema de comunicación y televisión de Sky. En estos dormitorios había camas, además de bolsas de plástico negras. Antes de llegar a este lugar se apreciaban porterías de futbol que los trabajadores utilizaban para divertirse.
En el dormitorio principal había pedazos de cinta canela, se presume que tenían a una persona amagada, pero de esto no se pudo comprobar nada.
En la cocina se detectaron alimentos, especies, botes de cerveza, tortillas duras, latas de verduras, leche, mole en bolsas y piloncillos con señas de mordidas de ratas.
Afuera en un árbol se encontró una libreta en donde había una lista con nombres como: Chema, Juan Carlos, Omar, Luis, Pollo Gringo, Martín, Carlillos, Noé, Papitas, Durango Nuevos, así como una lista de deudas de refrescos y comida.
Los galerones miden entre 30 y 60 metros de largo, se estima que producían de dos mil a dos mil 500 plantas por galerón.
LA INVESTIGACIÓN
Lo encontrado fue puesto a disposición del Ministerio Público de la Federación, que acudió para dar fe de lo encontrado y se sigan las investigaciones. Mientras que elementos del Ejército cuando lo dispongan las autoridades de la Procuraduría General de la República (PGR) acudirán a la destrucción del enervante.
Se presume que se tienen más invernaderos como los encontrados en otras zonas de la entidad, por ello la investigación continuará. “Es nuestro trabajo y estamos aplicando la Ley de Armas de Fuego y la erradicación de este tipo de plantíos, consideramos que puede haber más”, dijo el jefe de las Fuerzas Castrenses.
Hallazgo
Lo encontrado en el rancho Agua Nueva fue:
-6 galeras.
-3 camionetas.
-1 cuatrimoto.
-1 “cuerno de chivo”.
-Diversos casquillos.
-2 mil plantas de marihuana.
-9,600 almácigos de marihuana.
-7 kilos de semilla de marihuana.
-3 kilos de marihuana en greña.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Durango.
