No todo ha sido bueno para el protagonista Daniel Craig.
Perdió parte de su dedo anular de la mano derecha, tuvo una cortada debajo del ojo -mismo lado- que requirió varios puntos y se recupera de una lesión en el hombro, de la cual se resintió por el trabajo físico que requirió la película “Quantum of Solace”.
Sin embargo, Daniel Craig, tras tomar un respiro, dice no estar cansado ni arrepentido por haber dado vida nuevamente a James Bond. Aunque, confiesa que en este momento está en la búsqueda del equilibrio entre su vida personal y la carrera como histrión.
“No, hasta este momento no me he arrepentido ni me he sentido cansado de ser James Bond. A pesar de que ahora tengo inmovilizado el brazo (derecho) por mi lesión en el hombro, todo va muy bien; es sólo un desgarre”, comenta el actor inglés, de 40 años, en entrevista con la prensa en Beverly Hills, para promocionar la cinta.
Además de los accidentes de Daniel, en “Quantum...”, donde la Chica Bond es Olga Kurylenko, falleció un elemento de producción al hacer las pruebas de manejo con uno de los autos.
-Por lo sucedido, ¿en algún momento te dio miedo tener escenas de acción?
-No, para nada, pero sí me preocupaba un poco pensar lo que tendríamos qué hacer –ríe-. Pero ensayamos las secuencias una y otra vez hasta que quedaron.
“Cuando tenía día de descanso, pensaba en el set y cómo lo llevaríamos a cabo”.
-Por estos eventos desafortunados, ¿cómo te ha cambiado la vida James Bond?
-Desafortunadamente ocurrieron esas cosas y quizá no tendría que estar tan feliz. Mi vida ha cambiado. La gente me conoce más y eso me hace muy feliz.