Los hechos de violencia se siguen suscitando en diferentes regiones del estado de Durango.
El Siglo de Durango
GUANACEVÍ, DGO.- Un municipio aparentemente tranquilo, conocido en el ámbito nacional sólo por su intenso frío y actividad minera, da la nota roja. La delincuencia organizada ha traído la angustia a policías, autoridades y ciudadanos en general.
Hay temor e incertidumbre en la región; la Policía Municipal de Guanaceví ni siquiera quiere tocar el tema, mientras los agentes de la Comandancia Regional de la Dirección Estatal de Investigación (DEI), consternados, se abocan a las indagatorias.
REACCIÓN
El alcalde Manuel Abelardo Arzola Rodríguez ayer se reunió con Jesús Gutiérrez Vargas, procurador de Justicia del Estado, para analizar los hechos de sangre ocurridos en Guanaceví y así ver qué medidas se habrán de tomar.
Los cuatro agentes de la Policía Estatal asignados al municipio fueron emboscados y tres de ellos muertos: el comandante Nemesio Barraza Torres y los agentes José Cuéllar Najera y César Alfonso Lara Pérez; uno resultó lesionado, quien recibe atención médica.
POSIBILIDAD
Antonio Molina Ravelo, titular de la Dirección de Averiguaciones Previas (DAP), señala que según las investigaciones que se han realizado hasta el momento no se descarta la posibilidad de que la unidad en la que viajaban los elementos de la Policía Estatal haya sido blanco de una bazuca o arma de muy alto poder, además de “cuerno de chivo”.
PREOCUPACIÓN
En entrevista telefónica con Abelardo Arzola, reconoció que es preocupante y atemorizante la situación que se suscitó a escasos 16 kilómetros de la cabecera municipal de Guanaceví.
“Aunque no es la primera vez que ocurre una situación de esta naturaleza en el estado, en este municipio del Noroeste sí es un hecho sin precedentes”, comentó el edil.
INCÓGNITA
Dijo no tener idea de quién o de dónde pudieran ser los autores de la emboscada, ya que pueden ser de cualquier lugar del estado o de fuera. Llegaron, cometieron el atentado y se fueron, dijo.
Hay preocupación e impotencia
Los agentes que perecieron en el atentado eran bien conocidos en la parte Noroeste de Durango; dependían de la Comandancia Regional con sede en Santiago Papasquiaro.
Ayer Pedro Rojas, comandante regional de la Dirección Estatal de Investigación (DEI), se unió a las investigaciones que realizaban a la altura del kilómetro 16 del camino de la cabecera municipal de Guanaceví a la localidad de Cebollines, a la altura del arroyo del Chiquihuite.
Mientras tanto, en Santiago y Durango, los uniformados de la Policía Estatal dejaban ver tristeza en sus rostros, preocupación e impotencia por los hechos ocurridos en los que perdieron la vida tres de sus compañeros y uno más resultó herido.
