Cuando existe la llegada de una mascota nueva a casa, la alegría es enorme, pensamos en todo, menos en los peligros que tenemos en casa. Los perros son animales que aprenden mucho viendo, oliendo y probando todo a su alrededor. Sin embargo, muchas veces hemos formado parte de la visita al veterinario porque el can ya se comió algo. Lo más importante aquí es tener tiempo suficiente para enseñarle a la mascota lo que es un “No”.
Los principales peligros en casa son los cables de aparatos electrodomésticos o electrónicos. A nuestra mascota le gusta mordisquearlos estén o no estén conectados. Los materiales como pinturas, frascos, recipientes con veneno, limpiadores, etc. Las maderas, telas, juguetes, pilas, etcétera suelen ser de las comidas favoritas de nuestra mascota.
La cocina es un lugar preferido por muchos perros, en algunas casas es el lugar donde él come y la mayoría de las veces es el lugar donde huele bien y se pueden caer probaditas de algún alimento. Pero al mismo tiempo es el lugar más peligroso ya que corre el riesgo de que se le caiga algo encima (aceite u agua caliente), también se pueden caer los cuchillos u otro instrumento punzo-cortante de la cocina. Si tu mascota es de las que gusta estar masticando algo todo el día, existen huesos de carnaza, pelotas, y juguetes con los que puede entretenerse. Recuerda que estamos hablando de nuestra mascota y su cuidado; un miembro más en nuestra familia.