El Nacional Monte de Piedad, una institución benéfica fundada por el andaluz Pedro Romero de Terreros en 1775, vive este enero su particular 'agosto' al prestar más de 900 millones de pesos. (EFE)
El Nacional Monte de Piedad mexicano, una institución benéfica fundada por el andaluz Pedro Romero de Terreros en 1775, vivirá este enero su particular "agosto" al prestar más de 900 millones de pesos (83 millones de dólares) a 750 mil familias.
A pesar de sus más de 230 años de vida, la casa de préstamos líder de México, un referente en las obras de beneficencia en el país, continúa viviendo de la confianza de miles de mexicanos de cualquier nivel social, que se apoyan en esta institución para salir de sus apuros empeñando parte de sus bienes.
"Somos un centro de financiamiento cotidiano abierto a todos los sectores de la sociedad", explicó a Efe el portavoz de la institución, Gustavo Méndez, quien recordó que los estatutos y la vocación de servicio de la entidad jamás cambiaron.
Enero suele ser uno de los meses más dinámicos para la institución, con hasta 13 mil operaciones de empeño realizadas en un solo día en su sede de la capital mexicana, localizada junto al Zócalo, la principal plaza de la ciudad.
La institución nació a imitación del Monte de Piedad que existía en Madrid en tiempos de Carlos III y durante su primer año en activo realizó préstamos a 17 mil personas, la cuarta parte de los habitantes que entonces tenía la capital mexicana.
Un emprendedor español, Pedro Romero de Terreros, que llegó a México con 22 años, se convirtió en el fundador de una institución benéfica que sobrevivió sin cerrar jamás sus puertas pese a los vaivenes políticos que vivió México durante más de dos siglos, recordó Méndez.
La institución cobra un interés del cuatro por ciento y tras los gastos operativos, de avalúo y a las aseguradoras en que se apoya destina su remanente a obra social.
En 2007 se canalizaron a ese propósito entre 400 y 450 millones de pesos (de 37 a 41 millones de dólares), que recibieron personas con sida, diabéticos, enfermos de cáncer o quemados, agregó el portavoz.
La mayoría de los empréstitos que realiza la gente se hace para para comprar comida, realizar alguna consulta médica o análisis clínico, o para salir al paso del día a día cuando están en situación apurada, como es la actual "cuesta de enero".
El préstamo promedio es de mil 500 pesos (138 dólares) y la duración es variable dentro de un plazo de 17 meses para desempeñar.
Actualmente el Nacional Monte de Piedad mexicano cuenta con 152 sucursales ubicadas en ciudades de unos 100 mil habitantes donde recibe unos 33 millones de objetos con un valor superior a los 32 pesos (unos 3 dólares) en prenda cada año.
"De todos ellos el 97 por ciento son joyas y alhajas", señaló Méndez, quien mencionó algún caso extraordinario.
"Yo recuerdo que en una sucursal de costa llegó una mandíbula de tiburón cuyos dientes estaban unidos con cuerda y se usaba como arpa", explicó.
Aquel instrumento musical artesanal quedó en prenda un tiempo, pero más tarde fue recuperado, como sucede con el 96 por ciento de las operaciones.
Otros artículos empeñados incluyen electrodomésticos, vehículos, obras de arte y antigüedades.
A futuro la institución aspira a seguir su expansión ofreciendo sus servicios en municipios más pequeños y prevé alcanzar los 22 millones de operaciones prendarias este año, lo que representaría un incremento del 10 por ciento respecto al año anterior.
Sólo en enero de 2007 se prestaron 623 millones de pesos (unos 56 millones de dólares) que beneficiaron en enero pasado a 630 mil familias, con lo que este año se espera un incremento del 45 por ciento en los fondos prestados y del 19 por ciento en las familias beneficiarias finales.
