Expertos aseguran que la numerología te revela tu destino.
De acuerdo con la numerología, los nombres completos que aparecen en el acta de nacimiento suman “nombre de vida”.
La hija de Thalía no se llama Sabrina por mero capricho o por ocurrencia, sino porque su madre quiso que tuvieran la misma energía.
Aparecida Liberato recién publicó el libro “Díme cómo te llamas y te diré quién eres”, en el que aplica la tradicional matriz de doble entrada en la cual cada letra del abecedario corresponde a un número. Al sumar todas las letras de los nombres, se obtiene el “nombre de vida”.
Es un ejercicio que realizó, por ejemplo, con Madonna, nombre que suma siete, es decir el número del poder, lo cual explica su éxito. De acuerdo con Liberato, la numerología te revela tu destino.
Es por ello que “Thalía, quien seguramente sabe de esta ciencia, escogió para su hija un nombre acorde con su propia energía”.
Esto no quiere decir que tengan la misma personalidad, ya que también deben considerarse elementos como la fecha de nacimiento.
La autora explica: “En este otro aspecto, la suma de Thalía da el número seis, que es un número de arte, de música, de una persona que es bien recibida por la gente. Mientras que Sabrina es número que denota liderazgo, lógica, nada de sentimiento o de ser racional, sino de alguien que tiene prisa y está en la línea del liderazgo”.
La numeróloga también arroja algunas luces sobre otros artistas mexicanos como Luis Miguel, que tiene un número seis y un cuatro, que corresponde a personas que organizan cada paso que dan.
Los cuatro, son los conductores del mundo, son los que administran los detalles. “Quieren hacer las cosas con seguridad y planeación”.
Otro caso es el de Salma Hayek, cuyo nombre es un número 10: “Es una personas que tiene coraje, fuerza para empezar y es el número de la rueda de la fortuna: cuando baja un poco, tiene el impulso para subir con más fuerza, para levantarse; es un número muy fuerte, de una persona que no espera por los otros sino que tiene la capacidad de ser original y tener iniciativa”.
Pero no se necesita ser artista para predeterminar la energía de los hijos, tal como lo hizo Thalía. De hecho, Aparecida explica que el libro intenta ser una guía para padres que desean saber qué nombre ponerle a su hijo.
