SOMBRERETE, ZAC.- La versión que dio el joven Miguel Marín de la Torre, originario de Jerez, no es creíble ya que hay contradicciones que ponen en tela de duda que tres sujetos encapuchados hayan robado en días pasados el establecimiento de venta de teléfonos celulares en esta ciudad.
De acuerdo con la declaración ante el Ministerio Público de uno de los dueños del negocio, Valentín Ibarra Casas, establece que el robo fue algo raro, ya que no se sabe quién abrió las puertas del negocio y no está forzada la cerradura.
Al comparecer ante la Agencia No. 1 del fuero común, señala Ibarra Casas que su negocio está ubicado en la avenida Hidalgo número 145 y era atendido por el joven Miguel Marín de la Torre.
El joven empleado trabaja en el negocio desde el pasado 14 de diciembre, pero señala que sospecha de él, ya que es la única persona que contaba con llaves del comercio de teléfonos celulares.
“No es creíble la versión que da de que tres sujetos encapuchados robaron pues no se encuentra forzada la chapa y tampoco hay forma de meterse por la parte de arriba del negocio”.
NO TIENE LLAMADAS
Agrega que tampoco es creíble su versión de que llamó a la Policía Municipal marcando con la nariz y que estaba amarrado, ya que checó el teléfono y no existe ninguna llamada.
Valentín Ibarra agrega que también se llevaron seis mil pesos en efectivo de unos celulares que había fiado y que casualmente se los entregaron el día del robo, aunado a los 30 mil en mercancía y ocho mil en efectivo que se habían llevado, con lo que ya suman 44 mil pesos en total.
Añade que tampoco es creíble que se hayan llevado celulares en reparación; nadie sabía que se estaban arreglando, por lo que pide que se le investigue a él y los presuntos responsables.
Por su lado, los agentes de la Policía Ministerial señalan que el joven ha caído en varias contradicciones, pues primero indicó en su declaración que eran tres sujetos encapuchados y contradictoriamente dice que uno de ellos era güero.
