Eloy Cavazos encabezará esta tarde el festejo taurino que se realizará en el Coliseo Centenario de Torreón. (Archivo)
TORREÓN, COAH.- Originario de Guadalupe, Nuevo León, el matador de toros Eloy Cavazos es considerado una de las figuras principales de la fiesta brava mexicana y junto con Lorenzo Garza y Manolo Martínez constituyen la trilogía de la tauromaquia en su Estado natal.
En los quehaceres del toreo se inició como novillero el 12 de junio de 1964 a la edad de 15 años, y dos años después, el 28 de agosto de 1966, tomó la alternativa a los 17 años, justo tres días después de su cumpleaños (nació el 25 de agosto de 1949).
El “Pequeño Gigante” del toreo mexicano cuenta con infinidad de anécdotas en su andar por los ruedos, entre ellos está el ser uno de los toreros que más orejas ha cortado en su historial dentro de los ruedos, además de ser el elemento que más festejos ha toreado en un día, entre otros muchos logros conseguidos.
Su presentación como novillero se dio el 12 de julio de 1964 en la Plaza México, donde lidió al novillo “Trovador”, procedente de la ganadería Santa Marta, al cual le cortó dos orejas; el cartel era completado por Gonzalo Iturbe y Leonardo Manzanos.
Su alternativa ocurrió el 28 de agosto de 1966 en la Monumental de Monterrey, donde su padrino fue Antonio Velásquez y como testigo tuvo a Manolo Martínez. Su primer toro fue “Cariñoso”, ejemplar de Mimiahuapan.
La confirmación de Eloy Cavazos fue el 14 de enero de 1968 en el ruedo de la Plaza México, donde tuvo como padrino a Alfredo Leal y como testigo a Jaime Rangel. Ahí toreó a “Talismán”, astado procedente de la ganadería Jesús Cabrera.
Su confirmación, en Las Ventas de Madrid, España, se presentó el 22 de mayo de 1971, donde lidió a “Retoñito” de la ganadería José Luis Osborne, y como padrinos tuvo a Miguel Mateo y Gabriel de la Casa.
Tras una exitosa carrera decidió retirarse por vez primera de los ruedos el día 23 de mayo del años de 1985 en la Plaza Monumental de Monterrey, donde toreó ganado de Begoña y Mimiahuapan. Esa tarde cortó un total de diez orejas y cuatro rabos. Su retiró se debió a problemas de salud; más tarde descubriría que sus males habían sido causados por una cisticercosis.
Poco más de dos años después, justo el 13 de septiembre de 1987, regresó a los ruedos y reapareció triunfal en la Monumental de Monterrey.