El explosivo detonado el viernes pasado en Avenida Chapultepec no había sido usado antes en México por la guerrilla ni por el narcotráfico, informaron autoridades del Gobierno federal.
De acuerdo con reportes de la investigación, realizados por las autoridades del DF, la bomba estaba integrado por un “niple” o tubo de agua, un estopín o detonador, un teléfono celular, cables y una combinación de componentes químicos a base de acetona y peróxido.
El radio de la onda expansiva de este explosivo fue de alrededor de 70 metros, de acuerdo con la información que ha recabado la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF).
Los peritajes han determinado en sus conclusiones que la bomba explotó por accidente en manos de Juan Manuel Meza Campos, “El Pipen”, debido a una falla en el armado del sistema detonador.
Al parecer, dijeron investigadores consultados, desde que elaboraron esa bomba hubo un error en los cables de conexión con el estopín y el celular. Además, ese explosivo era tan sensible que podía activarse con un falso movimiento, fricción o un golpe.
“El explosivo ha sido usado por la ETA, al menos hasta hace 3 o 4 años; en México nadie lo ha usado antes, ni guerrilla ni el narcotráfico.
“Los peritajes están prácticamente terminados y hay teorías que, en caso de confirmarse, apuntarían a algo que no se ha visto en México a nivel de explosivos, porque no hay antecedentes”, dijo uno de los funcionarios consultados.
Ven al Cártel de Tepito tras fallido atentado
Las procuradurías General de la República y de Justicia del Distrito Federal investigan la implicación del crimen organizado en la autoría del fallido atentado del viernes pasado, en concreto, del llamado Cártel de Tepito, que aglutina por lo menos a diez bandas delictivas de ese barrio capitalino, dedicadas al narcomenudeo y al tráfico de armas.
Autoridades de ambas dependencias coincidieron en que una de las líneas de investigación apunta a esta organización —a la que pertenecen jefes de bandas apodados como “El Golda”, “El Borolas” y “El Cabezas”—, como la que urdió la colocación del artefacto explosivo el viernes pasado, en un ajuste de cuentas contra policías de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) capitalina.
Como parte de las pesquisas, se informó que se busca el nexo entre el Cártel de Tepito y Juan Manuel Meza Campos, alias “El Pipen” —el sujeto que perdió la vida cuando el artefacto que llevaba estalló antes de tiempo en avenida Chapultepec— así como de su acompañante Tania Vázquez Muñoz, la joven que resultó herida y que reside en la Unidad Habitacional Plan Tepito, considerada como uno de los centro de distribución de drogas al menudeo en el “barrio bravo”.
De hecho, al parecer “El Pipen” ya contaba con antecedentes penales por narcomenudeo en otras entidades del país, como el estado de Guerrero; además se busca verificar el hecho de que al parecer llegó hace algunos meses a la Ciudad de México para operar como vendedor de drogas al menudeo para los traficantes de Tepito, para la distribución de narcóticos en la delegación Cuauhtémoc, como la colonia Roma.
Las autoridades consultadas indicaron que como parte de esta línea de investigación, entre los posibles móviles de los integrantes del Cártel de Tepito para planear un atentado contra policías, está un acto de represalia por las pesquisas que se realizan desde 2007 en el ámbito local y federal, contra las células que trafican droga al menudeo y armas en el barrio.
Matan a cuatro personas
El cadáver de una mujer, de entre 15 y 20 años de edad, fue hallado en las aguas de la presa Madín, ubicada en Atizapán, Estado de México, sin que se conozcan las causas del fallecimiento, aunque presentaba un moretón en el glúteo derecho.
En tanto, en Tlalnepantla fue hallado el cadáver de un hombre desconocido, que presentaba 12 balazos en el cuerpo, el cual fue abandonado en el Periférico, a la altura de San Pedro Barrientos.
Reportes de la Procuraduría de Justicia de la entidad indican que a las 5:50 horas de ayer fue encontrado en el Periférico, a la altura del hotel Villa Jardín, el cadáver de un hombre de entre 25 y 30 años de edad, junto al cual había sangre y 12 casquillos percutidos y dos ojivas calibre nueve milímetros.
Además dos hombres fueron ejecutados en el poblado fronterizo Palomas de Villa, elevando la cifra a 10 muertos durante la última semana en esa zona al noroeste de Chihuahua, reportaron fuentes policíacas.
Las víctimas fueron identificadas como Javier Ortega Miranda, “El Boby”, y Adán Alonso Pérez Fuentes, alías “El Oscuro”. En los hechos resultaron lesionados Héctor Fuentes Leyva y Ricardo Regalado, quienes fueron trasladados a un hospital de Estados Unidos para recibir atención médica.