María Domitila Neave es la feliz ganadora del Premio Banamex a la Microempresa 2008, en la categoría de Responsabilidad Social Rural gracias a su café Internet. (Fotografía de Ángel Padilla)
María Domitila Neave Aguñaga es una microempresaria desde hace año y medio, gracias a que es propietaria del Ciber Cat, un café Internet instalado en el Ejido La Unión. Ella solicitó un microcrédito a la Unión de Crédito de Gómez Palacio y gracias a su puntualidad de pago participo, sin saberlo, en el Premio Banamex a la Microempresa 2008, resultando ser la feliz ganadora en la categoría de Responsabilidad Social Rural.
Sin contar con calles pavimentadas en la colonia Insurgentes, el pequeño local destaca gracias a una pequeña manta instalada al frente de su casa, anunciando los servicios del Ciber Cat y la papelería. Algunos bulevares se han construido alrededor del Ejido, así como tiendas de conveniencia y otros negocios, sin embargo, sólo hay un café Internet muy cerca de la carretera a San Pedro, por lo que no todos tienen el acceso a este servicio.
Por tal motivo y al dar un beneficio a la comunidad en donde vive, la microempresaria se hizo acreedora a este Premio, participando con miles de propuestas que se presentaron a nivel nacional.
Entrevistada en su negocio ubicado a una cuadra de una nueva carretera, María Domitila relató que la idea de abrir un café Internet nace de sus tres hijas Celia, Rocío y Mirna, quienes deseaban que dejará de trabajar como operaria en una maquiladora y se quedará en casa.
Celia hace año y medio estaba por recibirse de licenciada en administración de empresas, por lo que le propuso el ver la posibilidad de abrir un negocio propio para que no saliera de casa a laborar. Viendo que hacia falta un servicio de Internet para la comunidad decidieron instalar uno. Para ello pidieron información sobre el funcionamiento del microcrédito, y desde hace 2 años se organizaron para hacerse de recursos y comprar 4 computadoras y una impresora, así como mobiliario para comenzar operaciones.
Durante el primer año de operaciones, María Domitila tuvo que combinar su trabajo en la maquila y en el café Internet, sin embargo, pronto aprendió el cómo operar los equipos, por lo que hoy en día ya es una microempresaria al 100 por ciento.
3 microcréditos
María Domitila comentó que “no sabía que estaba concursando en un premio al pedir un crédito”. El primer microcrédito que autorizo el Consejo de Administración de la Unión de Crédito de Gómez Palacio para ella fue de 5 mil pesos, dinero que sirvió para adquirir una impresora, al finiquitarlo pidieron un segundo financiamiento por 10 mil pesos para comprar una copiadora. El tercer crédito autorizado fue por 13 mil pesos sirvió para adquirir un equipo de refrigeración, y abonar para la compra de una camioneta para realizar el mantenimiento de equipo y compra de papelería.
La microempresaria relató que poco a poco han hecho mejoras al café Internet, ya que anteriormente no estaba pintado, y no contaba con los servicios de papelería y dulcería.
Acondicionando un área de su pequeña casa y teniendo el mobiliario indispensable, el negocio ha logrado dar resultados ya que se ha cumplido con los compromisos financieros. Aunque la microempresaria confesó que “a mi no me gustan las drogas (pedir prestado)”, pero vio que los pagos eran accesibles y el interés bajo por lo que se animo a seguir con su proyecto.
