En estos terrenos debió haber iniciado desde hace meses la construcción de la planta tratadora de aguas residuales de Lerdo. (Archivo)
Cd. Lerdo, Dgo.- La larga demora para el inicio de la construcción de la planta tratadora de aguas residuales ha causado pérdidas a la empresa que ganó la licitación, sin embargo confía en que lleguen a un acuerdo el alcalde Carlos Aguilera y los integrantes del ejido Lerdo.
Gustavo Alfonso Alemán Padilla, responsable local de la empresa Tecnología Intercontinental, S. A. de C. V. (Ticsa), dice estar preocupado porque los tiempos corren. “Tenemos el dinero en la mesa y los retrasos causan pérdidas, pero estamos confiados en que el alcalde llegue a un buen entendimiento con el ejido Lerdo para comenzar la construcción”.
Y explica que “son 311 millones de pesos que generarán una importante derrama de recursos en el municipio, al crear fuentes de empleo y compra a proveedores. El proyecto como tal es bondadoso, pues además no le costará nada a la ciudadanía ni al Municipio”.
Por su parte, el primer regidor, José Dimas López Martínez, considera que el ejido Lerdo se está excediendo en sus demandas para firmar el convenio de la construcción de la planta tratadora, cuando debiera ser más conciliador. El edil considera que los ejidatarios están siendo mal asesorados por su abogado y cada vez muestran más renuencia para llegar a un buen acuerdo.
“El sábado pasado se reunió el alcalde Carlos Aguilera con los ejidatarios, pero ellos salieron ahora con otra nueva cláusula, cuando ya se pretendía llegar a un acuerdo en la firma del convenio”.
López Martínez explica que los propietarios “ahora quieren un seguro de tres mil pesos mensuales por cada una de las 282 hectáreas que riegan todavía con aguas residuales, de tal manera que si al regar con aguas de las norias tienen algún problema y no pueden regar, se les tendría que pagar esa cantidad, lo que equivaldría a casi un millón por mes y es lógico que el presidente municipal no aceptó porque no hay recursos para ello”.
Ante esa situación, dice, el problema se vuelve a entrampar en lugar de avanzar. “Lo que debería proceder sería la conciliación por medio de la presidenta del ejido, Oralia Guerrero Orona, quien además es del mismo partido político y alcaldesa sustituta”.
Como es del conocimiento general, a finales de agosto del año pasado se colocó la “primera” piedra para iniciar la construcción de la citada planta, pero los integrantes del ejido Lerdo se opusieron y la nueva Administración Municipal suspendió la obra para revisar los términos del contrato con la constructora.
“Lo único que queremos es la certidumbre jurídica de no tener problemas en el futuro con las otras administraciones municipales siguientes. No pedimos las perlas de la Virgen, sólo queremos protegernos”, declara Oralia Guerrero Orona, presidenta del comisariado del ejido Lerdo.
“Que quede bien claro; el ejido jamás se ha opuesto al progreso de Lerdo, pues en nuestros terrenos se han construido escuelas desde jardines de niños hasta preparatorias. No es que nos pongamos nuestros moños, pero papelito habla”, reitera.
Sobre la reunión del sábado anterior, en la cual no se llegó a ningún acuerdo con el presidente municipal, la dirigente de los ejidatarios considera que se ha metido más gente del Ayuntamiento a opinar y por eso se vino abajo todo.
