Yo no fui
A mí que me esculquen, dice Hacienda, en lo que se plantea como su primera acción formal de defensa frente al coro abrumador de tirios y troyanos que ubican el cáncer en la voracidad fiscal
Aunque acepta que con el incremento en el precio del crudo Petróleos Mexicanos aportó en los últimos tres años 36.7% de los ingresos públicos totales, la Secretaría de Hacienda niega que esto sea la raíz del colapso de la paraestatal.
A mí que me esculquen, dice, en lo que se plantea como su primera acción formal de defensa frente al coro abrumador de tirios y troyanos que ubican el cáncer en la voracidad fiscal.
De hecho, el título de uno de los capítulos de un documento denominado “Pemex y las finanzas públicas”, es más que explícito: “La contribución de Pemex a las finanzas públicas no pone en riesgo su viabilidad financiera”.
De acuerdo con ello el objetivo del régimen fiscal para las empresas petroleras en cualquier país es extraer la renta petrolera. Y como Pemex Exploración y Producción realiza las actividades en que se concentra ésta, está obligado a afrontar una carga mayor; en contraste con actividades como refinación y petroquímica, a las que se les aplica un tributo similar al Impuesto Sobre la Renta.
En apoyo de la tesis, la dependencia encabezada por Agustín Carstens señala que a raíz de la última reforma fiscal que planteó un escenario menos pesado para la empresa pública, Pemex Exploración y Producción ha obtenido rendimientos positivos.
Si antes de impuestos durante el periodo 2006-2007 se alcanzaban 700 mil millones de pesos, cubiertos éstos se llegó a 450 mil, en contraste con las pérdidas de 250 mil millones entre 2003 y 2005.
Lo curioso del caso, en paralelo, es que los rendimientos de Pemex Gas y Petroquímica Básica, sujetos al mismo escenario fiscal, se acotaron drásticamente. Si entre 2003 y 2005 éstos antes de impuestos alcanzaban 11 mil 300 millones de pesos, y pagados éstos 10 mil, entre 2006 y 2007 las cifras fueron de nueve mil y tres mil millones respectivamente.
En contraste, de acuerdo al documento de la dependencia, sin estar sujetos a un régimen tributario asfixiante, Pemex Refinación y Pemex Petroquímica tienen pérdidas.
El primero reportó entre 2003 y 2005 un rendimiento negativo de 44 mil millones de pesos, que se acotó a 35 mil entre 2006 y 2007.
El segundo alcanzó en el primer lapso una pérdida de 17 mil millones de pesos, que se redujo a 10 mil en el segundo.
Reunidos uno y otro periodos, mientras Pemex Exploración y Producción y Pemex Gas ganaron 20 mil 500 millones, Pemex Refinación y Petroquímica perdieron 60 mil 800.
La conclusión es obvia: los problemas de la paraestatal no son responsabilidad del fisco, sino de su ineficiencia. “Petróleos Mexicanos, señala letra por letra el documento, enfrenta retos importantes de eficiencia en su operación, cuya superación liberaría una cantidad importante de recursos y daría mayor rentabilidad a sus operaciones”.
Más allá, la Secretaría de Hacienda sostiene, otra vez a contrapelo de la abrumadora mayoría de los participantes en el debate sobre la reforma energética planteada por el gobierno, que en los últimos cuatro años Pemex ha contado con recursos adicionales significativos que le han permitido aumentar su inversión.
A partir de 2002 ésta creció 108.7%, para llegar en este año a 218 mil millones de pesos, frente a los 103 mil de 1999.
Estamos hablando, naturalmente, de inversiones compuestas, es decir, incluidos los Pidiregas.
De hecho, la dependencia sostiene que el monto es comparable con el de las multinacionales del ramo como Exxon Mobil, Royal Dutch/Shell, British Petroleum, Statoil y Petrobras.
Y por si faltaran sorpresas, Hacienda señala que en los últimos años la deuda neta de la paraestatal ha disminuido y se ha fortalecido su patrimonio.
Si en 2005 ésta ascendía a 450 mil millones de pesos, el año pasado se situaba en 360 mil…
Casi el paraíso.
Lo curioso del caso es que Hacienda defiende su ingerencia asfixiante en las decisiones de la paraestatal aduciendo que tiene que cuidar a su contribuyente mayor.
No, pos sí.
Balance General
Finalmente la Comisión Permanente del Congreso aprobó un punto de acuerdo para abrir una investigación sobre un presunto tráfico de influencias del ex secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, a favor de la filial en México de la Telefónica de España… de la que hoy es presidente.
Como le hemos señalado, la acusación directa contra el ex funcionario habla de haberle concedido una exención fiscal a una filial de la firma para llamadas de larga distancia. Estamos hablando del Grupo Telefónica Mexicana.
Más aún, se aduce que en una asamblea de accionistas de la firma celebrada el 18 de mayo de 2007 apareció el nombre del ex funcionario como su presidente, con la novedad de que entonces fungía aún como titular de Hacienda.
La referencia consta en la escritura pública 122766 levantada en la Notaría Pública 151 del Distrito Federal.
Por lo pronto, se están pidiendo informes a las secretarías de la Función Pública y de Comunicaciones y Transportes.
Cambio en Pemex
Al margen del destino final de la iniciativa de reforma petrolera planteada por el presidente Felipe Calderón, bajo el nuevo escenario habrá cambios en la cúpula de Pemex. De entrada, saldrá el director general, Jesús Reyes Heroles González Garza, tantito por su gris actuación y tantito por que ya no está a gusto.
Su molestia se inició desde el inicio del sexenio, cuando desde Los Pinos le impusieron a sus principales colaboradores.
El relevo, hasta hoy, apunta hacia el director general de la Comisión Federal de Electricidad, Alfredo Elías Ayub, aunque podría haber una sorpresa.
Embestida brutal
La aparición de un libelo de editorial y autor desconocidos bajo el titulo de La Mafia Cantón Zetina, representa la última embestida del gobierno de Tabasco para silenciar al diario Tabasco Hoy, dada su línea independiente.
En la ruta lo mismo se ha lanzado una cabeza humana a las instalaciones del rotativo, que se han prefabricado montajes de videos desprestigiando a una importante cadena hotelera, además de difamar a la familia del propietario del diario, Miguel Cantón Zetina.
En el largo rosario se le ha acusado a éste de narcotraficante, lenón, guerrillero, contrabandista y hasta miembro de Los Zetas; lo que ha desmentido una y otra vez la Procuraduría General de la República.
El jaque es contra la libertad de expresión.
albertobach@yahoo.com.mx
barrancoalberto@prodigy.net.mx
