¿Telmex por la libre?
Reclamada por la Comisión Federal de Telecomunicaciones “para proceder en consecuencia”, ayer la Cámara Nacional de la Industria de Televisión por Cable presentó una denuncia formal contra la alianza entre Teléfonos de México y la cadena MVS
Ésta, a la que se integró también la firma estadounidense Echostar Corporation, permitió la creación de la empresa Dish México, cuyo objeto es ofrecer servicio de televisión satelital, bajo el formato DHL, es decir, Televisión Directa al Hogar.
De acuerdo a la denunciante, la firma propiedad del magnate Carlos Slim se saltó las trancas al no solicitar la autorización de la instancia reguladora, dado que el título de concesión con que opera limita su actividad hacia áreas ajenas a la telefonía y anexas.
Del otro lado de la moneda, Telmex se defiende señalando que su tarea en el consorcio no será operativa, sino mercantil. Es decir, se constriñe a un ejercicio simple de cobranza.
El suscriptor del servicio Dish México, pues, recibirá el cargo correspondiente vía su recibo telefónico.
La alternativa la ofrece la firma a una cadena interminable de entidades públicas y privadas, entre ellas la propia Secretaría de Comunicaciones y Transportes, vía su filial Telecom.
Dicho con todas las letras, usted puede dictar un telegrama, y el costo se le carga en su recibo.
En el abanico, los donativos al Teletón se cobran por esa vía, para no hablar de las firmas que ofrecen envíos de imágenes, textos y demás opciones.
Se diría, pues, que la zancadilla es gratuita.
Lo evidente, sin embargo, es que tras la alianza existe la intención de la empresa hegemónica de enfrentar la creciente oferta de los cableros en el marco del triple play… mientras le llega su turno.
De hecho, Telmex reconoce en su contraofensiva que la tienda de enfrente obligará a las cableras a cancelar los subsidios cruzados con que hacen atractivos sus paquetes de televisión, Internet y telefonía, bajo una misma factura.
El alto costo del primer servicio permite abaratar el segundo y el tercero.
De hecho, el servicio de Dish México, con 25 canales en la mesa, entre ellos Disney, Jetix, Neck, Discovery Kids, Canal Latino y The Film Zone, costará 139 pesos al mes, abriéndose, de entrada, en dos entidades federativas.
Ahora que, en la carambola, la apuesta de la cadena MVS apunta a una suerte de revancha contra Televisa, quien canceló unilateralmente su canal 52 de la oferta de Cablevisión y Sky.
El golpe llegó justo un domingo, cuando la audiencia se concentraba en la transmisión de las peleas de lucha libre en los Estados Unidos, lo que provocó una airada protesta de la clientela.
A los dos días Televisa tenía los derechos para transmitir los eventos, bajo su propia oferta.
Del otro lado de la moneda, Multivisión ha comercializado desde el 2002 el servicio MasTV, con una oferta de 15 canales.
La paradoja del caso es que la gritería que se lanza hoy contra Teléfonos de México no tiene simetría con las protestas cuando adquirió una parte de la propiedad de Cablevisión, en una alianza que al final del día, cuando pretendió ser mayoritaria, la impidió la Comisión Federal de Competencia.
Lo curioso del asunto es que la posibilidad de que Teléfonos de México pueda integrar a su oferta propia el servicio de video la obstaculiza la exigencia de la Secretaría de Hacienda de cubrir una contraprestación para dar paso a la modificación de su título de concesión.
El argumento pareciera impecable: Si extiende el negocio, es justo que pague más por el espectro, cuya propiedad es del Estado.
Sin embargo, el trato no fue equitativo con las firmas que hoy pueden agregar a su cartera la telefonía.
Ahora que quien peleó con furia la exigencia fue el ex secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, quien acumulaba varios agravios contra Telmex desde la época en que dirigió la empresa de telefonía Avantel.
Lo curioso del caso es que bajo la nueva administración la Secretaría de Hacienda no ha podido o no ha querido fijar la fórmula para tasar el pago, pese a uno y otro requerimientos de la Comisión Federal de Telecomunicaciones.
En la maraña de intereses se habla de funcionarios de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y de la propia Cofetel afines a la causa de una u otra partes en pugna, lo que ha destruido su credibilidad.
Por lo pronto, llama la atención el que el anuncio de la alianza Teléfonos de México-MVS-Echostar Corporation, se haya realizado justo en el entorno de la gira por diversos países sudamericanos del presidente Felipe Calderón…cuyo invitado estrella fue Carlos Slim.
De hecho, el director general de Telmex, Héctor Slim, se paró a la mitad de una reunión para atender las telas del anuncio.
La guerra, pues, está calientita.
Balance general
Sin llegar a extremos preocupantes, los bancos se están descapitalizando al impacto del crecimiento de la cartera vencida a nivel de consumo.
El índice de Banamex, ubicado como el más capitalizado de los grandes, por ejemplo, bajó de 17.21 en agosto a 17.13 un mes después, en tanto el de Bancomer se incrementó ligeramente al pasar de 12.91 a 13.30.
En la lista de caídas están Santander, que pasó de 13.70 a 13.47; HSBC, de 12.90 a 12.93 y Banorte de 15.87 a 15.78.
El mínimo reclamado por los estándares es de ocho por ciento.
Tormenta sobre Ford
Mal y de malas, la intermediaria de crédito de la armadora Ford, Ford Credit de México, fue degradada en su calidad crediticia por la calificadora Standard & Poors, al tiempo que a la propia armadora se le volvió a colocar un escalón abajo.
La exposición de motivos habla de reflejarse el uso continuo de efectivo por parte de la firma, provocado por la disminución en la demanda de vehículos ligeros en Estados Unidos y la Unión Europea, en paralelo a la demanda de productos distintos a las grandes camiones pickup y suvs en el país del norte.
De hecho, la calificadora habla de que la compañía matriz podría verse obligada a reconsiderar una reestructura financiera, o de plano solicitar su inclusión al capítulo XI de la Ley de Quiebras de los Estados Unidos, al cerrársele las ventanillas de crédito.
Degradan a Cemex
De acuerdo a la bola de cristal de la casa de bolsa Acciones y Valores, las acciones de Cementos Mexicanos seguirán en el tobogán las próximas semanas.
De entrada, se augura una caída en su precio de más de un 50 por ciento en los próximos 12 meses, al pasar de 15 a 7.20 pesos el precio unitario por acción, en tanto los AD’s (American Depositary Receipt) caerían de 13 dólares a 6.50.
La empresa de Lorenzo Zambrano, dice el reporte, está obligada a renegociar sus vencimientos de deuda de corto plazo, ante una expectativa de caída de 2.3 por ciento en sus ventas.
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