El titular de la PGR resaltó que el trabajo sistemático, las investigaciones y procesos judiciales a nivel nacional e internacional permiten tener una visión estratégica más completa, profunda y de mayor alcance. (Archivo)
El titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Eduardo Medina-Mora, afirmó que la reproducción del crimen organizado está en crisis y señaló que la violencia que muestran las bandas delictivas es un signo de debilidad, desesperación y frustración.
Durante la reunión del Gabinete de Seguridad celebrada en Culiacán, Sinaloa, destacó que los acuerdos y vínculos en que sustentan su dominio territorial se están rompiendo, sus alianzas internacionales les han perdido confianza y les han retirado su crédito, además se les han asegurado drogas, armas, dinero e integrantes.
Afirmó que las autoridades están comprometidas con la decisión de actuar a fondo en su contra, intención que nace de una voluntad presidencial firme, de una visión estratégica distinta y de un profundo compromiso con la paz, tranquilidad y confianza de las familias mexicanas.
"Los sicarios se matan entre ellos por la lucha de mercado y el control de sus territorios y al hacerlo masacran la paz y la tranquilidad de toda la sociedad. Pasó en otras tierras y está sucediendo en México, particularmente en Sinaloa", puntualizó.
Medina-Mora comentó que la estrategia que despliega el Estado mexicano y el gobierno del presidente Felipe Calderón ha causado fuertes y severos daños a las células del crimen organizado que operan desde Sinaloa.
"Se les ha reducido y se les ha secado prácticamente el abasto de cocaína y seudoefedrina de aliados y contactos internacionales, y la desarticulación sistemática de sus redes logísticas y de operación les ha minado sus capacidades de siembra, cosecha, acopio, transporte y distribución de marihuana", subrayó.
El titular de la PGR resaltó que el trabajo conjunto y bien articulado de las autoridades financieras y de justicia de México, Colombia, Estado Unidos y países de Centroamérica ha logrado impactar redes y vínculos dedicados al "lavado" de dinero y el financiamiento de sus actividades.
Comentó que el trabajo sistemático, las investigaciones y procesos judiciales a nivel nacional e internacional permiten tener una visión estratégica más completa, profunda y de mayor alcance.
"Todo ello converge en más detenidos, en más sujetos a proceso penal y en sentencias cada vez más duras y más prolongadas contra los miembros de la delincuencia organizada, quienes forman parte de los grupos delictivos de esta región saben muy bien que la acción del Estado es hoy más fuerte y decidida en su contra", aseveró.
Medina-Mora indicó que al combinarse la lucha por mercados plazas y la dureza y convicción de las acciones del Ejército, de la Armada de México, de la Policía Federal y de los fiscales de la Federación en su contra, la reacción mostrada es de violencia y desesperación, "no nos engañemos, ni veamos espejismos, la acción del Estado ha tenido una respuesta".
El procurador recordó que desde hace un año se han sufrido las muertes de policías preventivos, judiciales y ministeriales de todos los niveles, como la del coordinador general regional de la PFP, Edgar Eusebio Millán, y antes la del inspector José Nemesio Lugo.
Reconoció que la impunidad y tolerancia social se han asentado a lo largo de los años a través de la corrupción, de la capacidad de corromper a elementos de las instituciones y de coptar por las buenas o por medio de la violencia a actores que estiman clave para la protección y desarrollo de sus actividades ilícitas.