En qué hay que fijarse antes de contratar a un abogado
Elegir a un abogado puede ser difícil aunque existen algunos elementos que le pueden ayudar y evitar a “los coyotes”. Los abogados deben ser elegidos para las tareas específicas y según su especialidad, no puede requerir al mismo para un asunto laboral que para un divorcio o para defenderlo cuando se le acuse de un crimen.
Deberá fijarse en el área de especialidad, su experiencia, reputación, cantidad de los honorarios y el tiempo que tardará su caso y preguntarle si ha tenido casos anteriores similares y cuál fue la resolución de los mismos ¿gana o pierde?, y compruébelo. Antes que el abogado empiece a trabajar en su caso debe plantearle qué estrategia va a seguir para resolver el mismo. Obtenga cada referencia que usted pueda. Cuídese de los abogados que no sean profesionales: todas las relaciones legales deben permanecer en una relación profesional siempre. También puede consultar al colegio profesional de abogados de su localidad, pues regularmente verifican la especialización o la experiencia de sus miembros.
Alberto Montes Rodríguez, presidente del Colegio Regional de Abogados de la Laguna del Estado de Durango (CRALED), opina que dos cosas en las que los clientes deben fijarse es la cédula profesional y puede verificar si el abogado está registrado en los tribunales federales, en Torreón, en el edificio del Poder Judicial de la Federación en el bulevar Independencia, además de pedir referencias de ellos. “La ciudadanía debe ser cuidadosa, como todo hay buenos y malos y muchos han estudiado en escuelas marca ‘patito’”, mencionó.
También existen dependencias donde se ofrece asesoría legal gratuita, por lo cual vale la pena informarse, en la mayoría de los ayuntamientos se brinda este tipo de ayuda o tienen conocimiento de organizaciones civiles o no gubernamentales donde pueden hacerlo, según sea el caso.
Además, no en todos los casos se requiere de un abogado, en ocasiones, si usted es requerido por alguna autoridad o recibe alguna notificación o citatorio –según sea el caso- puede ser suficiente con su comparecencia y quizá la firma de algún convenio en el que usted se comprometa a cumplir con lo que se le pide o dé su versión sobre un asunto por el cual fue citado.
Debe preguntarse qué arriesga y qué pasaría si el problema es ignorado, si existen otras formas de resolver el asunto. Algunas de las circunstancias en las que pueda requerir de un abogado es por ejemplo cuando compre o venda bienes raíces, si está envuelto en una demanda, ha sido arrestado o acusado de un crimen y si tiene preocupaciones de impuestos o problemas financieros.
En el caso de empresas, regularmente necesitará asesoramiento cuando esté decidiendo si transformar su empresa en una sociedad anónima o no, y necesita que se prepare la documentación necesaria. Cuando intente redactar o descifrar un contrato, cuando reciba una amenaza de demanda y cuando necesite ayuda para cobrar una deuda, entre otras cosas.
Los honorarios de los abogados pueden variar según el lugar donde trabaje la experiencia que tenga, su especialidad, y si se trata de un bufete grande o una pequeña oficina legal. Comprenda bien cómo cobra el abogado, pregunte por adelantado si le cobrarán la primera consulta.
Montes Rodríguez comentó que regularmente los abogados civiles pedirán un 20% de lo recuperado y los laborales el 30%, nunca se sabe lo que cobrará un abogado penal aunque el cliente a su vez siempre podrá comparar.
Si usted no está conforme con su abogado puede despedirlo o desvincularse de él aunque deberá medir los costos y beneficios de iniciar de nuevo el caso. Los abogados deben cumplir con reglas estatales de ética y el cobro de honorarios razonables. Procure guardar copia de todos los documentos importantes.