Reforma Energética
Como mencionaba en una de mis notas anteriores el panorama económico por la crisis en Estados Unidos es incierto y con incertidumbre, aún es pronto para poder evaluar el resultado de
la disminución de la FED en la tasa de referencia, así como el
plan de rescate anunciado por el Presidente Bush y salvo ciertos
ajustes aprobado por el Congreso, la desaceleración está afectan-
do las economías mundiales, por eso resulta desconcertante las
afirmaciones del Presidente Calderón y Agustín Carstens titular de Hacienda quienes dicen que México resistirá sus efectos.
Es cierto que tenemos fundamentos económicos sólidos y que no
se debe alarmar a la sociedad, pero también mueve a la desconfianza cuando sabemos que con una economía globalizada
es imposible quedar aislado de una situación como la que estamos
viviendo; basta constatar que los Bancos Centrales del mundo están tomando medidas para proteger sus respectivas economías,-
entonces México debe tratar de apuntalar nuestra economía real independientemente del comportamiento de los Mercados financieros.
Los resultados los veremos en un futuro corto, por lo pronto la desaceleración en el País vecino es preocupante, el crédito está detenido y falta de ver si el ciudadano común con la devolución de sus impuestos está decidido a consumir para que se pueda expandir la economía interna; por su parte el sector financiero espera apoyos de la inversión extranjera, esto precisamente, me conduce al tema enunciado al principio de éste artículo.
A propósito de acciones por parte del Gobierno, es de esperar que el Presidente Calderón y sus operadores políticos estén cabildeando para lograr que el Congreso apruebe la Reforma Energética; sabemos que Cantarell la joya de la industria petrolera mexicana registró la más baja emisión mensual del año, por décadas y en especial en los últimos años los altos precios del petróleo nos han permitido lograr desahogo en las finanzas públicas y apuntalar los principales fundamentos de nuestra economía, pero también los altos precios de los energéticos continúan siendo una de los principales fuentes de presión para los Mercados.
Todos los aspectos técnicos y administrativos del sector petrolero se encuentran sumamente golpeados y su recuperación requiere de recursos financieros muy importantes, esto es una responsabilidad del Gobierno y la inversión puede ser local o de fuera y sin hablar de una Nacionalización si hay forma de que se logren inversiones privadas, sin descuidar las partes estratégicas del sector, incluso con una plena responsabilidad subcontratar como en algunos casos se está haciendo, negociando ventajas en las utilidades y recursos que se generarán sin duda alguna por un ciclo expansivo que se tendría, lo cual beneficiaría no solo a decenas de sectores de la industria, también a la sociedad mexicana en general; entonces sí se podría ser optimista con hechos contundentes hacia el futuro.
