Además del encarecimiento de los insumos, los agricultores nacionales están en desventaja competitiva con relación a sus similares en EU.
Los agricultores enfrentan una situación doblemente complicada para producir y ser competitivos en México. Aunado al encarecimiento de los precios de los insumos, como lo son los fertilizantes, químicos y combustibles, los empresarios del ramo se encuentran maniatados para ser competitivos con los apoyos que reciben los productores del campo de parte de las tesorerías de otros países del mundo.
El escenario difícil es dibujado por Miguel Ángel del Hoyo, presidente de la Cámara Agrícola y Ganadera de Torreón (CAGT), quien comentó que “definitivamente en este momento el campo vive una situación bastante complicada, lo cual se ha venido diciendo por las competencias desleales a nivel mundial”.
Dijo que sus competidores reales no son sus homólogos de otros países, sino las tesorerías de otras naciones con las que se compite, los cuales cuentan con mayores apoyos a los que realmente recibe un agricultor mexicano, por ello subrayó que “tenemos una desventaja real frente a ellos”.
Aunque los precios de los granos está en su mejor momento, los agricultores mexicanos no han podido aprovechar el “boom” debido a que los insumos para cultivar se han encarecido también.
Del Hoyo manifestó que el sector no sólo se enfoca a producir granos, sino otro tipo de cultivos, sin embargo, el aumento en los combustibles, fertilizantes y químicos ha sido tal que resulta difícil aprovechar el buen nivel de precios de los granos. “Se han incrementado los insumos en una forma tremenda”.Para ejemplo de ello, se mencionó que los fertilizantes en lo que va del año han aumentado entre un 30 a un 50 por ciento, los combustibles en una proporción similar.
Sin tecnología y tardanza en apoyos
Otro factor en contra para los agricultores es la falta de tecnología en la producción. Dijo desconocer si es por razones políticas o de Gobierno, pero a la fecha no han podido entrar al país semillas transgénicas, las cuales garantizan una mayor productividad al igual que lo hacen los países del primer mundo.
“Esto ayudaría a mejorar la productividad dentro del campo mexicano”. Por otra parte, la tardanza en la llegada de los apoyos del Gobierno a productores nacionales es otro elemento en contra. Lamentó que el Gobierno anuncie con bombo y platillo grandes bolsas de recursos, del orden de 210 mil millones de pesos, sin embargo, dichos recursos no están destinados a elevar la productividad, sólo el 20 por ciento de ellos. Señaló que el 80 por ciento de los recursos se destinan a dar apoyos sociales del campo, pero que no tienen nada que ver con elevar la productividad de la agricultura en México.
Nada rentable, sólo de subsistencia
El dirigente explicó que con el alza de precios a los granos se estimula la producción, sin embargo, el encarecimiento de los insumos agrícolas ha sido en una mayor proporción, por lo que cuestionó que “es rentable hasta donde, de subsistencia de vivir, pero no de generar riqueza como tal para poder crecer y hacer nuevas inversiones y generar nuevos empleos”.
Con 110 mil hectáreas de siembra en La Laguna y la generación de 160 mil empleos directos, Del Hoyo aseguró que los productos del campo no están creciendo, el algodón lo hace debido a los apoyos gubernamentales que tiene. “Yo no digo que ningún producto agrícola no sea rentable, sino más bien de subsistencia y se sobrevive”.